Enzimas artificiales contra el estrés oxidativo
Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la primera causa de muerte y los trastornos neurodegenerativos se están convirtiendo en una importante carga para los sistemas sanitarios a nivel mundial, sobre todo ante el envejecimiento de la población. El estrés oxidativo, que es producto de un desequilibrio entre la generación de especies oxigenadas reactivas y los mecanismos de defensa antioxidantes de las células, parece estar implicado en esas enfermedades y hay evidencia que apunta a que un denominador común serían los radicales superóxido. Ante la prevalencia de esas enfermedades entre la población europea, el proyecto financiado con fondos europeos «Designing metallopeptides for the removal of superoxide radicals» (MFROSPEP) se propuso encontrar nuevas soluciones terapéuticas. Los investigadores decidieron emular los procesos naturales que tienen lugar en las células para combatir los efectos perjudiciales de las condiciones de estrés oxidativo. Las células poseen superóxido dismutasas (SOD), metaloenzimas endógenas que convierten los radicales superóxido en las especies menos tóxicas dioxígeno y peróxido de hidrógeno. El equipo del proyecto MFROSPEP trató de replicar ese proceso, conocido como dismutación, desarrollando nuevos y mejores compuestos antioxidantes. En ese contexto, formularon prometedores esqueletos peptídicos capaces de ligar iones metálicos con actividad rédox en condiciones fisiológicas. Su grado de flexibilidad hacía posibles los ciclos rédox de los iones metálicos necesarios para la eliminación catalítica de los radicales superóxido, por lo que tales sistemas metalopeptídicos mostraban potencial para llegar a emular a las SOD. En su conjunto, la investigación llevada a cabo en el marco del proyecto MFROSPEP amplía nuestra comprensión de los factores clave necesarios para desarrollar agentes antioxidantes. Los sistemas peptídicos generados servirán de base para el desarrollo de enzimas SOD artificiales con aplicaciones terapéuticas contra trastornos cardiovasculares y neurodegenerativos. Considerando la carga económica para los sistemas sanitarios asociada con la neurodegeneración, la implantación de los resultados derivados del proyecto MFROSPEP podría mejorar una parte del fenotipo de la enfermedad.
Palabras clave
Antioxidante, especies oxigenadas reactivas, enfermedad cardiovascular, trastornos neurodegenerativos, superóxido dismutasa, enzima artificial, metalopéptidos
