Nuevos conocimientos sobre la diferenciación celular gracias a la nanotecnología
El estudio de los procesos biológicos mediante cultivos celulares no es en absoluto nuevo. Este tipo de investigación sobre los procesos de diferenciación celular en los que las células precursoras se vuelven células funcionales oculares, neuronales u óseas se ha practicado durante muchos años. No obstante, la nanotecnología ha generado nuevas posibilidades en cuanto a los procesos y las técnicas de control y estudio de los procesos de diferenciación. Investigadores europeos financiados mediante el proyecto CELLPROM («Programación celular mediante dispositivos a nanoescala») se propusieron crear superficies nanométricas nuevas que influyesen en la diferenciación celular y sirviesen para estudiarla in vitro. Los investigadores trabajaron con tres tipos distintos de células madre adultas humanas y animales: células madre embrionarias murinas (CMEm), células madre embrionarias pancreáticas y glandulares adultas humanas (PSLC) y células precursoras de la médula ósea murinas (MBMPC). Entre sus objetivos figuró el desarrollo de procedimientos y equipos que permitiesen la creación precisa de espacios moleculares confeccionados a medida o «nanopaisajes» (nanoscapes). Esta tecnología permitiría producir por vez primera poblaciones definidas de células programadas en concreto para el estudio de la diferenciación celular. El proyecto CELLPROM logró progresos importantes en el desarrollo de dispositivos nanotecnológicos. Este tipo de investigaciones podrían desembocar en avances importantes sobre la diferenciación celular y en último término permitir terapias moleculares y celulares contra distintas enfermedades.