Terapia regenerativa para el corazón
Las células madre embrionarias (CME) constituyen una fuente inagotable de producción de tipos de células deseados, incluidos los cardiomiocitos, a través de una diferenciación controlada. Esto las convierte en una herramienta muy valiosa para la medicina regenerativa. La inyección directa de cardiomiocitos obtenidos de CME al miocardio infartado demostró una baja recuperación funcional de este. Esto era debido a la incorporación ineficaz de las células inyectadas; no obstante, las pruebas también indicaron que las células trasplantadas eran capaces de generar tejido nuevo. Para mejorar la retención y viabilidad de los cardiomiocitos, el proyecto HEARTREGENERATION, financiado con fondos comunitarios, propuso incorporar las células en un gel bioactivo inyectable. El trabajo previo en ratones atímicos había demostrado que la combinación de células endoteliales y de músculo liso facilitaba la formación de nuevos vasos. En el estudio HEARTREGENERATION, los investigadores evaluaron el potencial de trasplantar cardiomiocitos obtenidos de CME y células vasculares en un gel a un modelo animal de infarto de miocardio. Se evaluaron determinados parámetros como la neovascularización y la recuperación funcional del miocardio. Se generó una matriz sintética de hidrogel sensible a las metaloproteinasas que facilitó la fijación de células endoteliales y la formación de una red de tipo vascular. El uso de este material de soporte para inyectar células endoteliales y de músculo liso al corazón infartado produjo una mejora de su capacidad contráctil. Para favorecer la actuación de las células trasplantadas, los científicos han estudiado el uso del factor de crecimiento endotelial vascular en el contexto de una matriz 3D. Además, marcaron las células con una formulación de nanopartículas para rastrear su destino de manera no invasiva utilizando imágenes obtenidas por resonancia magnética. En suma, el proyecto HEARTREGENERATION proporcionó pruebas experimentales de que el trasplante de células en una matriz constituye un método válido para la reparación cardíaca. A pesar de que la estrategia propuesta deberá ser validada clínicamente, ofrece una alternativa prometedora a la restauración de la vascularización en un corazón infartado.