Mejorar la captación de energía solar al tiempo que se reducen los costes
La dependencia energética mundial de los combustibles fósiles ha dado lugar a una serie de problemas importantes, incluidos los efectos ambientales de los gases de efecto invernadero (GEI), las fluctuaciones en la seguridad energética relacionada con la oferta y la demanda, los altos costes de la energía, el agotamiento de los recursos naturales y el acceso limitado por parte de la población en los países en desarrollo. La energía solar captada por las células solares fotovoltaicas (PV) ofrece soluciones a muchos de estos problemas en forma de energía limpia y renovable. Además, si se aprovecha la radiación solar reflejada por la superficie terrestre junto con la radiación directa se puede aumentar significativamente la cantidad de energía captada, ya que se estima que la radiación reflejada representa entre el 30 % y el 50 % de la radiación directa. Sin embargo, los métodos actuales de fabricación de células solares de dos caras (bifaciales) son complicados y caros. Un equipo de investigadores europeos asociados en el proyecto Reflects («Células solares monoestrato bifaciales novedosas para el aprovechamiento de la radiación solar reflejada») se propuso emplear procesos de fabricación de células solares bifaciales sencillos, facilitando así un medio rentable para mejorar la captura de la radiación solar. Concretamente, los investigadores utilizaron una tecnología establecida de origen lituano para la fabricación de células solares de silicio monocristalino (c-Si) de una sola cara con las que prepararon el extremo frontal de la célula y, fundamentalmente, reprodujeron el proceso para fabricar el extremo posterior. Con este procedimiento se simplifica enormemente el proceso de fabricación de las células solares bifaciales actual. Los resultados del proyecto Reflects podrían aumentar significativamente la aplicación generalizada de las células fotovoltaicas para captar la radiación solar, tanto directa como indirecta, lo que podría tener un efecto espectacular en lo que a emisiones de gases de efecto invernadero, seguridad energética y de acceso o costes se refiere. La comercialización de las células solares bifaciales podría pues proteger el planeta al tiempo que mejoraría la calidad de vida de las personas en los países menos desarrollados, que pese a contar con mucha luz natural, tienen un acceso muy limitado a electricidad para hacer funcionar aparatos sencillos. La solución elegante y económica propuesta por los socios de Reflect podría atraer a los inversores hacia una industria dominada en gran parte por las pequeñas y medianas empresas (PYME), creando así puestos de trabajo y estimulando las economías de todo el mundo.