La Comisión propone nuevos límites para las emisiones de benceno y de monóxido de carbono
La Comisión ha publicado una propuesta de Directiva del Consejo sobre los valores límites del benceno y del monóxido de carbono en el aire ambiente. En la propuesta de Directiva se tienen en cuenta los objetivos de la Comisión en cuanto a prevenir o reducir los efectos perjudiciales del benceno y del monóxido de carbono para la salud humana y el medio ambiente. En ella se estipula la evaluación de las concentraciones de benceno y monóxido de carbono en el aire ambiente y la transmisión al público de información adecuada sobre dichas concentraciones. Además, se indica que la información pública sobre el benceno debería actualizarse por lo menos una vez al mes, y la de monóxido de carbono una vez al día. En última instancia, lo que se propone es evitar el deterioro de la calidad del aire cuando ésta sea buena y mejorarla en los demás casos. En la propuesta de Directiva se establecen valores límites máximos y mínimos de niveles aceptables de monóxido de carbono y de benceno en el aire ambiente y se dan márgenes de exceso para concentraciones de ambos. El margen de exceso propuesto para el benceno es de 5µg/metro cúbico (100%) a la entrada en vigor de la Directiva, con una disminución lineal a partir del 1 de enero de 2003 y posteriormente cada 12 meses hasta alcanzar el 0% el 1 de enero de 2010. El margen de exceso tolerado para el monóxido de carbono es de 5mg/metro cúbico (50%) a la entrada en vigor de la Directiva, con una disminución lineal a partir de 1 de enero de 2003 y posteriormente cada 12 meses hasta alcanzar el 0% el 1 de enero de 2005. (Estos valores -tanto para el benceno como para el monóxido de carbono- se calculan con el volumen ajustado a una temperatura de 293K y a una presión de 101,3kPa.) En la propuesta de Directiva también se establecen criterios para la determinación de puntos de toma de muestras y fuentes de datos. Como parte de la estrategia sobre la calidad del aire, la Comisión propone asimismo presentar un informe al Parlamento Europeo y al Consejo el 31 de diciembre de 2004 a más tardar. En ese informe se revisarán y propondrán objetivos comunitarios en este ámbito y se elaborarán estrategias de aplicación que garanticen el cumplimiento de dichos objetivos.