La cultura alimentaria de la guerra y los aliados
El proyecto «Inter-Allied cultures and identities during World War 1» (WW1 ALLIED CULTURES) analizó los componentes británico, francés y estadounidense, así como sus respectivos ejércitos imperiales y coloniales. Las diferencias entre estas culturas se abordaron a través de la identidad alimentaria. La comida es esencial en tiempos de guerra para mantener alta la moral de las tropas. Las familias enviaban comida local y se contaron por millones los paquetes con provisiones caseras que ayudaron a los soldados a sobrellevar el conflicto. A pesar de que se criticaron las raciones aliadas por su escaso sabor, los dirigentes aliados eran conscientes de la importancia de la comida. Asimismo, en la comida entran en juego particularidades religiosas, y se atendió a esta realidad suministrando comida especial, como en el caso de los 140 000 trabajadores de la India que recalaron en Europa. Por supuesto, fue inevitable que la Primera Guerra Mundial propiciara la mezcolanza de los hábitos alimentarios. La identidad intercultural de la coalición se forjó a través del intercambio de recetas. A ello ayudó en cierta medida la American Relief Administration de Hoover, una iniciativa estadounidense valorada en 100 millones de dólares que se dedicó a ayudar a Polonia y a la hambrienta población rusa al término de la guerra. De esta forma, el patrimonio alimentario vivió un momento de crisis y surgieron oportunidades para establecer nuevas redes comerciales. La comida también estructuró la identidad aliada, hasta el punto de que compartir alimentos se consideraba un valor típico de los aliados. En cambio, el enemigo y quienes medraban en tiempos de guerra fueron considerados instrumentos de la inanición. El camino hacia la victoria se cimentó en la llamada «economía del sacrificio». De acuerdo con ese espíritu, la ayuda alimentaria de emergencia recibía contribuciones locales, nacionales e internacionales. Distintas organizaciones benéficas, entre ellas la Cruz Roja, tendieron la mano a los grupos amenazados por la falta de alimentos: los niños, la población refugiada y los soldados desarraigados. WW1 ALLIED CULTURES ha creado una plataforma de conocimiento que podría aplicarse a un estudio similar sobre la Segunda Guerra Mundial para establecer comparaciones. El estudio de las identidades y la guerra entre coaliciones también arroja luz sobre las controversias actuales en torno a cuestiones multiculturales.
Palabras clave
Identidad alimentaria, coalición bélica, Primera Guerra Mundial, religión, patrimonio, multicultural