Desde las primeras estructuras cósmicas al universo actual
En las últimas décadas, se han multiplicado los conocimientos sobre la formación y evolución de las primeras estructuras cósmicas gracias a las observaciones de centros pioneros con una precisión sin precedentes. Además, distintos modelos teóricos de gran complejidad han facilitado la creación de réplicas exactas del universo real con las que someter a prueba nuevas ideas sobre los efectos de las supernovas en las galaxias. La comparación entre las observaciones y las simulaciones numéricas resulta crucial para mejorar nuestra idea actual acerca de la formación de galaxias en un contexto de acumulación jerárquica. El proyecto LACEGAL(se abrirá en una nueva ventana) (Latin American Chinese European galaxy formation network), financiado con fondos de la UE, reunió a especialistas de renombre internacional para abordar estas cuestiones sin respuesta. Entre otros temas, LACEGAL examinó los procesos físicos que se espera que rijan la formación estelar durante la edad de Hubble, así como los efectos de la formación de galaxias en las propiedades del medio intergaláctico e intercumular. También se hizo hincapié en los nuevos conocimientos sobre el universo con un altísimo corrimiento al rojo y sobre los retos que plantean las simulaciones numéricas más punteras. El objetivo final consistió en ayudar a los científicos europeos a esclarecer la formación de galaxias y a hacer avanzar el modelado del crecimiento de estructuras cósmicas. Con este fin, la red de LACEGAL estableció nuevas colaboraciones con centros de China y América Latina en los que se llevan a cabo experimentos novedosos y de gran interés. A lo largo de los cuatro años de vida de la red, se han producido más de cien intercambios entre los socios de China, Europa y América Latina. Las conclusiones de esta cooperación se han publicado en treinta y cinco artículos y se han presentado en numerosos congresos y seminarios internacionales. Cabe destacar que la red LACEGAL ha ayudado a crear alianzas duraderas con científicos de otras partes del mundo que se dedican a las simulaciones numéricas de la formación de estructuras cósmicas. Un ejemplo del éxito de la red fue la concesión de una beca del Newton Fund destinada a mantener la colaboración científica entre socios de Chile y el Reino Unido.