Biomasa forestal para generar energía
Actividades forestales tales como la tala y la cosecha de madera dejan tras de sí residuos ricos en biomasa y desechos que podrían utilizarse para producir bioenergía y biocombustibles, y para suministrar biomasa forestal de forma eficiente es preciso desarrollar nuevas herramientas de gestión y tecnológicas que abarquen toda la cadena de suministro. Además, es necesario evaluar el impacto de estas actividades en las dinámicas del carbono en tierra, la biodiversidad, los equilibrios de nutrientes y el crecimiento y la productividad de los bosques. El proyecto INFRES (Innovative and effective technology and logistics for forest residual biomass supply in the EU), financiado con fondos comunitarios, creó nuevas tecnologías de cosecha, transporte y almacenamiento dirigidas a suministrar biomasa forestal residual a países de la UE minimizando el impacto medioambiental. INFRES desarrolló una herramienta computacional que compara costes, consumo de combustible y emisiones de dióxido de carbono procedentes de maquinaria utilizada en las cadenas de suministro de madera combustible más habituales. Asimismo, los investigadores evaluaron las ubicaciones más adecuadas para almacenar madera combustible y el método y el tiempo óptimos para secar la materia prima forestal. Gracias a este análisis, lograron generar nuevas soluciones eficientes en cuanto al consumo de combustible que reducen la utilización de energía fósil y minimizan las pérdidas de materias primas a lo largo de toda la cadena de suministro de biomasa forestal. Por ejemplo, descubrieron que al utilizar camiones más grandes para astillas se reducen los costes de transporte, al tiempo que optar por tecnología híbrida para las máquinas astilladoras permite ahorrar en consumo de combustible. Además, la eliminación de impurezas como arena y tierra de las astillas también permite que el transporte resulte más eficiente. Junto con las mejoras tecnológicas, INFRES diseñó sistemas de gestión flexible de la flota para llevar a cabo las operaciones de cosechado, astillado y transporte. Los socios del proyecto desarrollaron modelos de negocio innovadores que redundan en el beneficio mutuo de diversos sectores. Una de sus sugerencias consistió en secar la biomasa utilizando el calor sobrante que generen otras empresas. Otra animaba a que los emprendedores almacenasen y entregasen astillas de forma conjunta a sus clientes, reduciendo de esta forma las distancias y los costes de transporte globales. La movilización de biomasa forestal residual puede constituir una vía eficiente para alcanzar los ambiciosos objetivos que ha fijado la UE en materia de energía y cambio climático. En definitiva, contar con un suministro sostenible y fiable de las materias primas forestales debería beneficiar a las industrias de sistemas de calefacción, generación de energía y biorrefinería, al tiempo que permitirá que la economía europea resulte más competitiva.
Palabras clave
Biomasa forestal, bioenergía, cadena de suministro, INFRES, madera combustible, astillado
