Superficies inhibidoras de microbios para la industria alimentaria
La contaminación microbiana de las superficies de preparación y de los equipos industriales de procesamiento de alimentos puede afectar a la calidad de los productos y ocasionar enfermedades transmitidas por los alimentos. En la actualidad, en la mayoría de las plantas de procesamiento de alimentos se utilizan superficies de acero inoxidable que se limpian periódicamente con desinfectantes químicos para limitar el crecimiento de las bacterias y otros microorganismos. El proyecto CLEANSURF (Durable biofilm-restraining surfaces and cleaning procedures for the food processing industry), financiado con fondos de la Unión Europea, respondió a esta situación desarrollando nuevos recubrimientos de superficies que evitan que los microbios se adhieran a las superficies y los equipos, por lo que estos serán más fáciles de limpiar. Cuando los microbios se adhieren a una superficie, en ocasiones, varias células individuales se agrupan formando biopelículas, que se agarran con fuerza a las superficies secretando una sustancia pegajosa. CLEANSURF redujo la acumulación de biopelículas en las superficies mediante la creación de recubrimientos innovadores donde las bacterias y otros microbios tienen dificultad para adherirse. Estos recubrimientos se basan en unos compuestos con silicio llamados silanes, que se pueden modificar químicamente para obtener nuevas superficies de recubrimiento con funciones predefinidas. Mediante un proceso de fabricación de materiales denominado «sol-gel», fue posible incrustar enzimas antimicrobianas o nanopartículas en una matriz de recubrimiento para crear superficies a medida más especiales aún, capaces de erradicar, por ejemplo, la acumulación de biopelículas. Por último, los socios del proyecto CLEANSURF crearon superficies más eficaces que el acero inoxidable sin tratar en lo que respecta a la prevención de la adherencia de los microbios. Tales superficies son más fáciles de limpiar, disminuyendo así el tiempo de inactividad requerido para la desinfección periódica y reduciendo el gasto de agua, energía y productos químicos nocivos para el medio ambiente. Después de una labor de prueba y selección, se evaluaron los materiales idóneos para la creación de recubrimientos superficiales en pruebas de campo. Estas consistieron en exponer las superficies recubiertas a leche en los reactores de una planta de elaboración de quesos y, acto seguido, en determinar el grado de crecimiento de biopelículas en comparación con las superficies de acero inoxidable. Los innovadores recubrimientos inhibidores de biopelículas del proyecto CLEANSURF poseen amplias aplicaciones y cambiarán drásticamente las normas higiénicas del sector alimentario. Un ejemplo sería aplicar el proceso de recubrimiento a esterilizadoras y pasteurizadoras como las utilizadas en la industria de procesamiento de zumos, purés y concentrados.