Un nuevo sistema de abastecimiento de combustible reduce las emisiones de la biomasa
Ya se utilizan calderas que funcionan con virutas de madera para calentar estancias, en sustitución de las calderas alimentadas por combustibles fósiles. A pesar de la elevada eficiencia térmica y de la baja emisión de partículas, los sistemas de abastecimiento de combustible de las calderas de viruta de madera a pequeña escala son responsables de casi el 90 % de las paradas imprevistas de las centrales eléctricas. Esto limita la disponibilidad de las centrales eléctricas y da como resultado un aumento de las emisiones nocivas. Un grupo de científicos responsable del proyecto BIOCHIPFEEDING(se abrirá en una nueva ventana) (Wood chip feeding technology of the future for small-scale biomass boilers), financiado por la Unión Europea, desarrolló un nuevo sistema de abastecimiento de bajo coste que erradicará todos los inconvenientes relevantes que presentan los sistemas actuales. El nuevo sistema consiste en una pinza que retira material combustible de la sala de almacenamiento y lo transporta a un contenedor. Está provista de sensores que seleccionan la calidad del combustible atendiendo al tamaño de las partículas y al contenido de humedad. Un programa informático inteligente que se comunica con el sistema de abastecimiento puede identificar la ubicación de la viruta de madera de baja o alta calidad. De este modo, se puede asegurar que la calidad total de la mezcla de combustible permanece constante al descargar el combustible. A diferencia de otros sistemas desarrollados antes que recogen el combustible que se encuentra en el fondo de la pila, la nueva pinza ligera extrae el combustible de la parte superior. Además de reducir los costes de mantenimiento, esto supone un importante ahorro en costes de explotación como consecuencia de una disminución del consumo de energía. Un tornillo sinfín abastece constantemente a la planta de combustión de viruta de madera procedente del contenedor de almacenamiento donde se aloja la viruta mezclada. Un sistema de control permite un funcionamiento totalmente automático. Esto significa que sólo se suministrará material adecuado para el estado de funcionamiento de la caldera. El combustible se suministra uniformemente con una calidad constante que se ajusta al momento funcional de la caldera. Estos cambios mejoraron significativamente el rendimiento de la caldera. Se instalaron con éxito dos prototipos dotados con pinzas de diferentes tamaños, habiendo varientes apropiadas para diferentes plantas. Las pinzas son compatibles con las grúas convencionales y por lo tanto pueden ser fácilmente integradas en los sistemas existentes. El nuevo sistema está llamado a mejorar la eficiencia de las calderas y el cociente de aprovechamiento. Además de resultar especialmente atractivo para futuras instalaciones de calefacción por viruta de madera a pequeña escala, también puede sustituir a las plantas de combustión de biomasa antiguas. Se espera que el número de unidades nuevas instaladas aumente de las 700 000 actuales hasta más de 1,6 millones anuales en 2020.