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Astrónomos de la AEE ayudan a la observación de un púlsar de milisegundos recién nacido

Combinando imágenes del telescopio espacial Hubble de NASA/Agencia Espacial Europea (AEE) y radioobservaciones, los astrónomos han descubierto lo que podría ser la primera representación de un púlsar de milisegundos recién nacido, un objeto celeste que gira cientos de veces po...

Combinando imágenes del telescopio espacial Hubble de NASA/Agencia Espacial Europea (AEE) y radioobservaciones, los astrónomos han descubierto lo que podría ser la primera representación de un púlsar de milisegundos recién nacido, un objeto celeste que gira cientos de veces por segundo alrededor de su propio eje. Por lo que se conoce, los púlsares son estrellas de neutrones de rápida rotación, que emiten pulsos regulares de ondas de radio y demás radiaciones electromagnéticas. Los astrónomos que trabajan con Hubble se han encontrado con un insólito sistema compuesto por un púlsar de rápida rotación y una estrella compañera (roja). Entre las hipótesis que se barajan está la que apunta que el par representa un púlsar de milisegundos recién originado al poco de haber sido "despedido" por su estrella compañera. Aun cuando se hayan identificado hasta la fecha más de 90 púlsares rápidos de milisegundos, todavía no se han hecho observaciones que respalden la teoría de cómo alcanzan ese estado. Las observaciones del púlsar de milisegundos PSR J1740-5340 parecen revelar por primera vez la fase final del proceso de aceleración de púlsares. Aparentemente el descubrimiento apoya la teoría de que los púlsares nacen de la absorción, por una vieja estrella de neutrones de rotación lenta, de la materia de una veterana estrella compañera, por lo general una gigante roja. La materia choca contra la superficie de la estrella de neutrones transmitiendo energía que acaba acelerando la velocidad de rotación. El proceso finaliza cuando el púlsar, una vez revitalizado, da cientos de giros por segundo.