Busquin insta a la creación de redes de programas nacionales de investigación agrícola
El comisario europeo de Investigación Philippe Busquin reclama la construcción de una plataforma europea de ciencias vegetales a través de la creación de redes de programas nacionales de investigación. El cambio de actitud de la sociedad hacia la investigación de los productos alimentarios y la agricultura exige a los investigadores que presten una mayor atención a las preocupaciones del público y de otras partes interesadas. En una intervención en la conferencia Euragri, celebrada en Bruselas el 15 de octubre, el señor Busquin instó a los investigadores y al público en general a no rehuir de las nuevas tecnologías pertinentes de este campo. "Las nuevas tecnologías, que pueden aportar beneficios reales a los ciudadanos y mejorar la competitividad de la agricultura europea, no pueden ser descartadas por ignorancia o prejuicios. En vez de ello, debemos trabajar para equilibrar la gobernanza y la libertad de investigación que permiten el avance de la ciencia, y para adoptar un enfoque equilibrado que evalúe los riesgos, los costes y los beneficios de cada nuevo desarrollo," informó el comisario. La Comisión cree conveniente intensificar el dialogo entre las diferentes partes interesadas y, en concreto, entre los investigadores y el público en general. Esto llevaría a los investigadores a valorar las preocupaciones y las susceptibilidades de la sociedad y a los ciudadanos a comprender mejor los beneficios que ofreen las nuevas tecnologías agrícolas. El uso de los organismos modificados genéticamente demuestra una falta de dialogo. La explotación y desarrollo de cultivos transgénicos está aumentando en muchos países, a pesar de que esta práctica se encuentra todavía sometida a una regulación cada vez más estricta en la UE. Varias plantaciones experimentales han sido destrozadas en toda Europa, lo que ha provocado la ubicación de las instalaciones de investigación en otros países. Según la Comisión, esta pérdida probablemente tenga serias consecuencias en la competitividad europea. Actualmente, la producción agrícola asciende en la UE a 220.000 millones de euros anuales, y da empleo a unos 7,5 millones de personas. En la industria alimentaria trabajan 2,6 millones de empleados y está valorada en 600.000 millones de euros. La Comisión ha solucionado esta falta de comunicación mediante una serie de debates de mesa redonda sobre la seguridad de la investigación de los organismos transgénicos, en la que participan investigadores, organizaciones de consumidores, organizaciones no gubernamentales de medio ambiente, administraciones nacionales y la industria. La Comisión ha contribuido también a la ejecución de 81 proyectos de investigación sobre bioseguridad con 70 millones de euros durante los últimos 15 años y destina, dentro del VI Programa Marco, 685 millones de euros a la calidad y la seguridad alimentaria.