La Comisión ha acogido positivamente el debate sobre la financiación europea de la investigación sobre defensa
La Comisión ha recibido favorablemente los comentarios de la Presidencia griega que sugieren que la UE debería financiar proyectos de investigación sobre materias de defensa, y ha pedido un debate ulterior sobre el tema. Nikos Christodoulakis, ministro de Hacienda de Grecia, ha sido el último en defender el final de la política de la UE según la cual los fondos para investigación se limitan estrictamente a proyectos civiles. Afirma que las oportunidades de creación de empresas mercantiles que brinda la investigación militar son claves para que Europa logre su objetivo de convertirse en la economía más competitiva del mundo en 2010. Un portavoz del Comisario de Investigación de la UE, Philippe Busquin, manifestó una posición favorable a los comentarios del Ministro, y dijo que la Comisión se encuentra a la espera de un futuro debate sobre la cuestión entre los Estados miembros y el Consejo Europeo. "A menudo existe una línea divisoria muy estrecha entre la investigación militar y sus usos civiles, y vale la pena tomar en consideración el impacto que tendrían sobre la competitividad las empresas mercantiles creadas por escisión," afirmó. Un ejemplo adecuadamente mencionado es el de EEUU, donde el elevado gasto en investigación sobre la defensa continúa ejerciendo un notable influjo sobre la economía nacional. En este momento la Comisión analiza dos métodos posibles por los cuales la investigación sobre la defensa podría incluirse entre las actividades comunitarias. El primero consistiría en crear una agencia europea de investigación sobre la defensa, semejante a la agencia de proyectos de investigación avanzada sobre la defensa (DARPA) de EEUU, que coordinaría y asignaría los recursos destinados a proyectos conjuntos de la UE. La segunda medida posible sería crear un nuevo programa comunitario de investigación, en la línea de los actuales Programas Marco de investigación y desarrollo, pero centrados en cuestiones militares. Los recursos financieros para cualquiera de ambos sistemas podrían proceder de una nueva partida presupuestaria de la UE, o de un mecanismo intergubernamental financiado directamente por los Estados miembros. El portavoz del Sr. Busquin recalcó que no existen planes para incluir proyectos de defensa dentro de la estructura actual de los programas marco de investigación de la UE, y dijo que en este debate la Comisión desempeñaría un papel de observador. Cualquier forma de financiación comunitaria de proyectos de defensa podría chocar con la oposición de algunos Estados miembros, sobre todo de los países neutrales desde el punto de vista militar, por ejemplo Irlanda, Suecia, Austria y Finlandia.
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