La oveja Dolly ha sido sacrificada
La oveja Dolly, el primer mamífero clonado a partir de una célula adulta murió el 14 de febrero a los seis años de edad. Fue sacrificada después de que un examen veterinario determinara que la oveja padecía una enfermedad pulmonar progresiva. Normalmente las ovejas viven unos 11 o 12 años, y los científicos estudiarán a partir de ahora si su estado fue debido a un envejecimiento prematuro. Ya se le había diagnosticado artritis en 2002, lo cual fue considerado por algunos, entre los que se incluye Ian Wilmut, director del equipo que creó a la oveja, como una prueba de la ineficacia de las técnicas de clonación. "Debemos esperar los resultados del examen post mortem que se le practicará a Dolly con el fin de comprobar si su muerte, relativamente prematura, estuvo relacionada de algún modo con el hecho de que fuera un clon", dijo el profesor Richard Gardner, presidente del grupo de trabajo de la Royal Society para la investigación de células madre y la clonación terapéutica. "Si existe una conexión con el hecho de que fuera un clon, esta aportará más pruebas evidentes de los peligros inherentes a la clonación reproductiva y de la irresponsabilidad de todo aquel que intente aplicar este trabajo también a seres humanos." Los científicos también comprobarán si el hecho de que la madre de Dolly viviera sólo seis años puede haber afectado asimismo a la esperanza de vida de la oveja Dolly.