Convertir el mundo en un lugar más pequeño
Una empresa austriaca revolucionará la comunicación entre los ciudadanos europeos mediante el lanzamiento de una gran pantalla circular que permite la comunicación oral y visual entre dos personas, en tiempo real, con alguien que esté en otro país. El Tholos, así denominado por un tipo de templo circular de la Antigüedad griega, tiene una pantalla de aproximadamente siete metros de diámetro por tres metros de altura. Las próximas instalaciones enlazarán 16 ciudades europeas en 2008, y las dos primeras que participarán serán Londres y Viena, a principios de 2004. "Es una nueva forma de comunicación que unirá a ciudadanos de todo el mundo," ha dicho Suzanna Collis, portavoz del proyecto, a Noticias CORDIS. "Las personas podrán interactuar con toda normalidad, como si estuviesen una al lado de la otra." El primero que concibió la idea fue el operador de cámara austríaco Andreas Traint cuando estaba trabajando en la industria cinematográfica. A lo largo de seis años la empresa creada para poner en práctica la idea, Tholos Systems, ha desarrollado cuatro prototipos diferentes. El modelo definitivo incluye micrófonos direccionales y altavoces, junto con cinco cámaras y proyectores, y una tecnología patentada que procede de la tecnología cinematográfica. Las imágenes se proyectan sobre un cilindro giratorio con ranuras situado en el interior de la estructura, y las cámaras y el cilindro se sincronizan de modo que las imágenes se capten a intervalos cada vez que una ranura pasa frente a la lente de una cámara. A medida que gira el cilindro, las imágenes proyectadas crean una imagen envolvente continua. Al mismo tiempo, las personas que se encuentren en cualquier punto alrededor del Tholos pueden filmarse a través de la pantalla. Aunque todavía no se ha elaborado el calendario definitivo, París será una de las próximas ciudades que va a disponer de un Tholos. Otras ciudades de la lista, todas ellas con más de un millón de habitantes, son Copenhague, Budapest y Varsovia. Más adelante, la red se enlazará con ciudades de América y Asia. Se calcula que la construcción e instalación de un Tholos costará alrededor de dos millones de euros. Los costes de explotación se financiarán mediante publicidad, que ocupará el 13 por ciento del tiempo de emisión, permitiendo así que el público en general disponga de acceso gratuito. En un período inicial, se programarán y anunciarán por anticipado los enlaces en directo con ciudades específicas. Más adelante las personas podrán hacer una reserva de enlace del Tholos con cualquiera de las ciudades participantes. Si bien al principio el Tholos ha sido considerado como una atracción turística, también se espera que tenga aplicaciones educativas y empresariales. Ya han comenzado los debates sobre la utilización de esta tecnología en hospitales universitarios. Los médicos situados en un Tholos pueden caminar alrededor de la pantalla, visualizando a un paciente desde todos los ángulos. Esta herramienta posee un interés obvio para la comunidad empresarial, sobre todo en el campo del marketing. Ya se ha manifestado su interés por la iniciativa, y Tholos Systems piensa construir una unidad móvil, más pequeña, para satisfacer esta demanda. La Sra. Collis dijo a Noticias CORDIS que la empresa había debatido sobre el Tholos con representantes de la Comisión Europea, y continúa realizando contactos periódicos con eurodiputados del Reino Unido, Francia, Alemania y Austria.
Países
Austria, Reino Unido