Un informe señala la importancia de la aceptación de las tecnologías de la información y las comunicaciones para la productividad y la competitividad Los niveles de crecimiento de la productividad en Europa están muy influenciados por la innovación y la aceptación de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC), según la edición 2003 del informe sobre competitividad de la Comisión. Sin embargo, el informe a... Los niveles de crecimiento de la productividad en Europa están muy influenciados por la innovación y la aceptación de las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC), según la edición 2003 del informe sobre competitividad de la Comisión. Sin embargo, el informe afirma también que Europa todavía no ha alcanzado todos los beneficios de la total productividad que puede suponer la difusión de las TIC. En los Estados miembros, la contribución de la inversión de TIC a la aceleración de la productividad laboral europea en los años 90 fue mayor en Irlanda, Finlandia y Suecia y menor en Portugal, España y Alemania. De los países más grandes, sólo en el Reino Unido las TIC desempeñaron un papel importante en el crecimiento de la productividad. En lo que respecta a las empresas, el informe señala que las que combinan mejoras organizativas con inversión en TIC tienden a lograr un alto crecimiento de productividad. Las aplicaciones de negocio electrónico, por ejemplo, que utilizan la mayoría de las grandes empresas de la UE, requieren no sólo inversión en tecnología sino también cambios organizativos que producen un impacto profundo en el entorno de trabajo. Sin embargo, según el informe, es necesario continuar fomentando la adopción de aplicaciones ligadas al comercio electrónico por las pequeñas y medianas empresas (PYME). En su intervención el 28 de noviembre en Bruselas, el Comisario europeo de Empresa y Sociedad de la Información, Erkki Liikanen, comentó: "La inversión en TIC es claramente uno de los motores principales de crecimiento de la productividad y también de la innovación. Sin embargo, [...] no deberíamos concentrarnos en la tecnología por el mero hecho de serlo. Si queremos recoger los beneficios de la productividad de las TIC deberíamos invertir, paralelamente, en la reorganización de las empresas y las administraciones, y en las competencias. Este es un elemento clave para un enfoque de gobernanza informática apropiada". En cuanto al análisis de las regiones europeas, el informe muestra una correlación positiva entre la productividad y la intensidad de I+D, la especialización en actividades de alta tecnología y el número de estudiantes que continúan la enseñanza superior. Las regiones muy productivas tienden a tener una cultura empresarial bien desarrollada con solidez entre los vínculos entre la investigación auspiciada por las universidades y las actividades de innovación de las empresas. También se muestra que los grupos de alta tecnología de ámbitos como el de la biotecnología confieren ventajas en términos de productividad gracias al acceso común al conocimiento y al capital. Unas buenas conexiones a los principales medios de transporte, especialmente aeropuertos internacionales, y una red moderna de telecomunicaciones son características de las regiones que poseen un fuerte rendimiento productivo. "El punto común", señala el informe, "parece ser el potencial de conectar los diferentes actores económicos, tanto en el sentido físico, a través de redes de transporte y de comunicaciones óptimas y, de forma más intangible, a través de una visión común entre los interlocutores regionales y de las colaboraciones entre las universidades y las empresas". El informe revela asimismo que, aunque todavía son significativas las disparidades de crecimiento de la productividad entre las diversas regiones de la UE y los países candidatos, éstas van disminuyendo paulatinamente.