La Comisión rechaza los consejos de los científicos sobre las cuotas de pesca
La Comisión ha decidido no seguir las orientaciones científicas del Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES) en sus propuestas sobre las cuotas de pesca para 2004. El ICES está preocupado concretamente por la precariedad de las reservas de bacalao en el Mar del Norte, Mar de Irlanda y oeste de Escocia, y por ello ha recomendado a la Comisión que imponga las capturas cero en estas zonas y que, incluso, se devuelva al mar el bacalao capturado de forma accidental. Sin embargo, en los planes de la Comisión publicados el 4 de diciembre se afirma que "La propuesta consiste en mantener el TAC [totales adminisbles de capturas] del Mar del Norte para el bacalao a su nivel actual de 22.659 toneladas" y propone una reducción del 53 por ciento para el bacalao del oeste de Escocia. La Comisión justifica su decisión de seguir autorizando la pesca de bacalao en estas zonas mediante la promesa de endurecer la aplicación de TAC fijado. Entre estas medidas se incluye que las flota de pesca faene en la mar durante un máximo de cinco días y que permanezca amarrada o fuera de la zona de pesca una vez agotado este periodo. La Comisión afirma en sus propuestas: "Ya que el TAC propuesto para esas especies de pescado no se ajusta al dictamen científico, es esencial que se cumpla y la mejor manera de lograrlo es limitando la actividad pesquera". El cierre del Mar del Norte a la pesca de bacalao producirá probablemente el desempleo masivo de los colectivos dependientes de la pesca. El bacalao nada junto a otras especies que son a menudo capturadas en las mismas redes. Para aplicar eficazmente el número de capturas cero, las cuotas relativas a las otras especies deberían también ser reducidas drásticamente. Hans Lassen, consejero principal de pesca en el ICES, insiste en la validez de los consejos emitidos por la organización. Declaró a New Scientist: "Hemos recomendado cerrar las pesquerías de bacalao y nos mantendremos en esta decisión".