La investigación será uno de los principales beneficiarios del aumento del presupuesto comunitario propuesto por la Comisión
Tal y como se esperaba tras las recientes declaraciones del Presidente de la Comisión, Romano Prodi y del Comisario europeo de Investigación, Philippe Busquin, la propuesta sobre el presupuesto de la Comisión para el quinquenio 2007-2013, que se dio a conocer el 10 de febrero en medio de una fuerte polémica, solicita una mayor contribución de los Estados miembros de la UE para desarrollar las iniciativas de investigación e innovación en el ámbito europeo. La Comisión resalta tres prioridades para una Europa ampliada: crecimiento sostenible; ciudadanía, libertad, seguridad y justicia; y convertir a la UE en un socio global. Investigación e innovación se encuadran en la primera prioridad, ya que el crecimiento requiere "una Europa más dinámica y mejor comunicada", según se señala en la propuesta. "Para ello es necesario un cambio fundamental en las políticas para respaldar la infraestructura física y de conocimiento de la UE. Eso quiere decir que es necesaria la acción para mejorar la investigación, fomentar la iniciativa empresarial y la innovación y establecer redes en el ámbito europeo". Por tanto, la Comisión exige que las asignaciones prometidas para el crecimiento sostenible pasen de 47.582 millones de euros en 2006 a 76.785 millones en 2013. El presupuesto comunitario total, de unos 100.000 millones de euros anuales, es actualmente el 0,98 por ciento del PIB de la UE. La Comisión pretende aumentar esa cifra hasta alcanzar el 1,22 por ciento del Producto Nacional Bruto (PNB) a partir de 2007. Esa cifra seguiría estando por debajo del límite máximo permitido del 1,24%. Sin embargo, la propuesta se ha visto envuelta en una gran polémica porque seis Estados miembros ya han manifestado su voluntad de restringir el gasto al 1 por ciento del PNB. En cuanto a la investigación, la propuesta de la Comisión destaca cinco áreas a las que es necesario destinar más fondos: reparto de becas a equipos de investigación seleccionados mediante concurso, refuerzo de la estructura física y de los recursos humanos; fomento de las asociaciones entre socios públicos y privados; estimulación del desarrollo de polos de excelencia; y coordinación de programas nacionales de investigación. La propuesta también subraya la importancia de la creciente inversión en las políticas comunitarias sobre espacio y seguridad. A pesar de que la propuesta no menciona de forma expresa la posibilidad de crear un Consejo Europeo de Investigación (ERC), la idea de "financiar los proyectos realizados por equipos de investigación seleccionados mediante concurso, sobre todo en investigación básica" encaja perfectamente con la descripción del consejo propuesto. La Comisión publicó hace poco una comunicación sobre 'Europa y la investigación básica', en la que aseguraba que se plantearía la creación del ERA. Volviendo al tema de la infraestructura, la propuesta menciona los grandes lásers europeos, los bancos de datos biológicos en genómica y las redes informáticas como iniciativas en las que se prevé un incremento de la inversión. También se prevé la coordinación de los programas nacionales en campos de investigación como el cáncer, la enfermedad de Alzheimer, la nanotecnología y los retos sociales y económicos. En opinión de la Comisión, todas estas prioridades, que se beneficiarían de una financiación adicional, justifican el aumento de las contribuciones nacionales. Los Estados miembros ya se han comprometido a aumentar el gasto en investigación hasta el 3 por ciento del PIB para el año 2010, del cual un 1 por ciento provendría del sector público, mientras que la financiación comunitaria en investigación constituye actualmente el 0,04 por ciento del PIB. "Para ayudar a que Europa se convierta en un modelo de excelencia que atraiga a investigadores e inversores, debemos eliminar las barreras a la excelencia que se derivan de los programas nacionales segmentados. Sin embargo, la mejora de calidad no será suficiente", señala la propuesta. "También habrá que incrementar el esfuerzo en investigación". Pero la investigación por sí sola tampoco es suficiente para garantizar el crecimiento europeo. La Comisión define la promoción de la transferencia de tecnologías como una de las prioridades. "Esto debería hacerse a través de flujos de conocimiento y redes de innovación". La política de innovación, por su parte, "también contribuirá a fomentar la inversión en innovación, en el cambio organizacional y en soluciones innovadoras de diseño". Romano Prodi presentó el 10 de febrero ante el Parlamento Europeo las perspectivas financieras y explicó que la propuesta fue elaborada atendiendo en primer lugar a decisiones políticas y luego, fundamentando las cifras en esas prioridades. Restringir el gasto de la UE al uno por ciento del PIB sería anteponer los números a la política, señaló.