La consulta sobre el futuro de la investigación revela un amplio respaldo a las propuestas de la Comisión
Los resultados de la consulta de la Comisión sobre el futuro de la política comunitaria en materia de investigación han revelado un apoyo generalizado a las propuestas de la Comisión, pero una necesidad de esclarecer determinados aspectos. En junio de 2004, la Comisión publicó sus directrices para la futura política de la Unión Europea de apoyo a la investigación, que contenían una estructura de seis más dos. Los seis ejes principales eran los siguientes: - crear polos de excelencia; - lanzar iniciativas tecnológicas en las zonas industriales más importantes; - estimular la competencia entre los principales equipos de investigación; - reforzar los recursos humanos; - desarrollar infraestructuras de investigación de interés europeo; - intensificar la coordinación de los programas nacionales. El 'más dos' se refiere a los dos campos relativamente nuevos que recibirán fondos comunitarios destinados a la investigación - el espacio y la seguridad. La consulta recibió más de 1.700 respuestas, así como comentarios escritos sobre diferentes aspectos de la comunicación. La Comisión está recibiendo además los documentos de posición sobre la consulta, y por ahora ha reunido unos 100. Los seis objetivos principales que establecen las directrices recibieron respuestas positivas por parte de más del 80 por ciento de los encuestados, y se comprobó que algunas de las prioridades están muy generalizadas entre los participantes. Por ejemplo, más del 95 por ciento de los encuestados afirmó que es 'importante' o 'muy importante' conseguir que Europa sea más atractiva para los mejores investigadores, mientras que más del 90 por ciento consideró igualmente importante la creación de centros de excelencia. Las respuestas por escrito indicaron que las partes interesadas necesitan más información sobre determinadas propuestas, en concreto las relacionadas con la investigación fundamental y las iniciativas tecnológicas, para poder participar en el debate. En el caso de estas últimas, las personas que respondieron a la consulta manifestaron que es necesario que exista transparencia y establecer unas 'reglas del juego' claras como condiciones para el éxito. También pidieron más información sobre los planes para apoyar las infraestructuras de interés europeo, en concreto respecto a los criterios para definir 'interés europeo' y el mecanismo de financiación diseñado. Los encuestados destacaron además la necesidad de que esta prioridad abarque una amplia gama de disciplinas, incluidas las ciencias sociales y las humanidades. El respaldo a la investigación en seguridad y materia espacial fue menor que el mostrado a los seis objetivos principales - un 24,1 de los encuestados consideró 'muy importante' el espacio, mientras que el 40,4 por ciento lo consideró 'importante'. En lo que se refiere a la seguridad, las cifras correspondientes son 27,2 por ciento y 37,2 por ciento. Las respuestas escritas reclamaron la necesidad de conseguir un equilibrio entre las libertades fundamentales, los derechos humanos y los valores sociales. Se plantearon también a las partes interesadas varias cuestiones que se abordan en el documento de la Comisión, como la competencia industrial, la atención de los temas más importantes, la administración y la ciencia y la sociedad. El 88,3 por ciento de los encuestados consideró 'muy importante' o 'importante' la competencia industrial, y el mayor respaldo procedía de las grandes empresas. Los comentarios de los encuestados apuntaron al valor de determinadas medidas para las pequeñas y medianas empresas (PYME), pero pedían un aumento del presupuesto para poder reducir el exceso de demanda. Sin embargo, varios participantes cuestionaron la decisión de diferenciar las PYME y otras empresas, y sobre todo las empresas que son simplemente un poco más grandes. Los comentarios subrayaron también la necesidad de que la innovación sea considerada como algo fundamental en los proyectos de investigación de la UE, y pidieron fortalecer esto en la fase de evaluación y mediante disposiciones sobre derechos de propiedad intelectual en los contratos del programa marco. Un gran número de encuestados se mostró partidario de incluir el tema de la ciencia y la sociedad en los programas marco, mientras que otros muchos afirmaron que hace falta lograr una mejor relación entre la ciencia y la sociedad en general. Una minoría se mostró escéptica, y señaló que las consideraciones sociales no deberían anteponerse a los criterios científicos. Unos pocos participantes en la encuesta advirtieron también del aumento de la burocracia que conllevan esas consideraciones. El mayor número de respuestas (540) provino de particulares, seguido de universidades y centros de educación superior (456). También estuvieron representadas las grandes compañías, las PYME, los organismos estatales y las asociaciones. Alemania fue un país especialmente activo, con 258 respuestas, mientras que Reino Unido, Italia, Bélgica, Francia y España tan sólo aportaron 100 en su conjunto. La Comisión concluye que las respuestas recibidas 'constituyen un indicativo importante de las opiniones de la comunidad de investigadores y de los usuarios de la investigación', pero que el bajo índice de respuestas de algunos Estados Miembros, en concreto en los nuevos Estados Miembros, significa que algunos países no están adecuadamente representados.