Una multinacional reclama una "puesta a punto esencial" para los programas marco
Una revisión fundamental abarcaría todo el sistema relativo al procedimiento de aplicación administrativa y financiera del Programa Marco, según la empresa multinacional de electrónica Philips. Philips ha participado en cerca de 1.000 proyectos de investigación en los sucesivos programas marco de la UE desde que se lanzaran por primera vez en 1984. La participación ha disminuido en los últimos años, sin embargo, y con la idea de cambiar algunos de los aspectos que repercuten en la participación, Philips ha presentado sus comentarios sobre las propuestas de la Comisión para el VII Programa Marco (VIIPM). Philips reclama una reforma reglamentaria, alegando que "hablando en términos económicos, los costes de transacción asociados (público y privados) han crecido de forma totalmente desproporcionada, con costes marginales de control, comprobaciones y balances que exceden los beneficios marginales." Para llegar al fondo de lo que Philips califica la "tristemente famosa burocracia del VIIPM", la Comisión debería introducir la noción de "asociación responsable", declara la compañía. Esto devolvería la confianza en el seno de los consorcios y entre la Comisión y los socios del consorcio. Entre los cambios reglamentarios sugeridos por Philips figura evitar la responsabilidad financiera colectiva, la cual cree la compañía genera importantes complicaciones, así como cargas para los consorcios. Philips considera conveniente asimismo la introducción de procedimientos rápidos de reparación, que podrían ponerse en marcha, por ejemplo, en forma de segundas opiniones, y estarían precedidos por un "rechazo injusto de las propuestas" y servirían para solucionar las quejas sobre la "microgestión exagerada, excesivas peticiones, procedimientos inapropiados y herramientas que no funcionan bien". Una propuesta que probablemente suscite polémica entre los actores menores de la investigación de la UE será la petición para la introducción de un trato especial para las grandes multinacionales, los usuarios habituales y los principales participantes en los programas marco. La justificación que da Philips para proponer este tipo de cambio es que evitaría que surgieran cuestiones innecesarias o idénticas en las múltiples propuestas y proyectos. Los cambios solicitados que serían más fácilmente aplicables incluyen la identificación de las mejores prácticas entre las Direcciones Generales que tratan con los programas marco, y la aplicación de éstas prácticas de forma uniforme por todos los que trabajan como responsables de los proyectos. Philips considera que sería conveniente también que las convocatorias de propuestas se publiquen con mayor regularidad y frecuencia para evitar el funcionamiento a plena carga. Para la fase de propuesta del proyecto Philips reclama que se abandonen las convocatorias de manifestaciones de interés, las cuales según cree la compañía generan mucho trabajo adicional dentro del VIPM sin que por ello se vean beneficios claros. El documento contiene también una petición para la designación de un mayor número de evaluadores de propuestas procedentes de la industria. En un llamamiento inusual para restringir la financiación de la UE, Philips advierte también: No recompensar la excesiva suscripción con cesiones mayores en las siguientes convocatorias, las suscripciones excesivas podrían ser el reflejo de una falta de orientación y de desarrollo del abanico de destinatarios." En contraste con otros muchos documentos de posición sobre el VIIPM, Philips propone desvincularse de la aplicación general del procedimiento en dos pasos para la presentación de propuestas y argumenta para ello el trabajo extra que implica. La compañía recomienda también que la Comisión "obvie las cuestiones éticas y sobre género si no son relevantes para la convocatoria". Philips apela a una orientación más sólida en materia de innovación dentro del VIIPM, y declara que para convertirse en la economía basada en el conocimiento más dinámica del mundo, el desafío clave de Europa no estriba sólo en adquirir más conocimientos, sino en convertir el conocimiento en un valor más económico. La compañía por lo tanto elogia la nueva orientación de la Comisión sobre conocimiento y crecimiento, pero añade, sin embargo, que el crecimiento a partir del conocimiento sólo surgirá si las aplicaciones, la valorización y la innovación obtienen también la adecuada atención a través de todo el VIIPM."