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Las mujeres tienen un mejor rendimiento en educación, aunque siguen estando infrarrepresentadas en los principales puestos académicos

El informe anual 2006 de la UE sobre la igualdad entre mujeres y hombres arroja una imagen desigual sobre la situación en Europa, donde las mujeres tienen un mejor rendimiento en ciertas etapas de la educación, aunque siguen estando por detrás de los hombres en términos de emp...

El informe anual 2006 de la UE sobre la igualdad entre mujeres y hombres arroja una imagen desigual sobre la situación en Europa, donde las mujeres tienen un mejor rendimiento en ciertas etapas de la educación, aunque siguen estando por detrás de los hombres en términos de empleo y remuneración. En el prefacio del informe, el Comisario de Empleo, Asuntos Sociales e Igualdad de Oportunidades, Vladimir Spidla, señala que "hoy en día las mujeres acaparan la mayoría de las licenciaturas universitarias y [...] ha crecido de forma constantemente el acceso al empleo y, por lo tanto, a una independencia económica". De hecho, en 2004, casi el 80 por ciento de las mujeres de entre 20 y 24 años había como poco completado los estudios de bachillerato, frente a menos del 75 por ciento de los hombres. A nivel de estudios de licenciatura, las mujeres de nuevo son más numerosas y tienen más éxito que los hombres, representando el 59 por ciento de todos los graduados. Sin embargo, en cuanto a los estudios de doctorado, la participación de las mujeres decae un 43 por ciento, y sólo el 15 por ciento de los catedráticos universitarios son mujeres. Las diferencias en las disciplinas de estudios siguen manteniéndose, y las mujeres siguen infrarrepresentadas en la ingeniería, las ciencias y la tecnología, siendo más probable que las encontremos estudiando en los ámbitos de la salud, la educación o las humanidades. En cuanto al aprendizaje permanente, hay más mujeres que hombres que siguen cursos de educación de adultos y de formación en los 21 Estados miembros de la UE, con una media de participación del 11,7 por ciento de las mujeres, frente al 10 por ciento de los hombres. La UE ha destacado en el pasado la creciente importancia de lograr la igualdad de género en ciencia, dentro del contexto de la competitividad. Si la UE quiere convertirse en la economía más competitiva del mundo para 2010, se debe invertir más en investigación y desarrollo (I+D), afirma la Comisión. Y para que los Estados miembros inviertan más en I+D, se necesitan más científicos, entre 600.000 y 700.000 para lograr una inversión en I+D del tres por ciento del PIB. Una forma de elevar el número de personas dedicadas a la ciencia en Europa es animando a que más mujeres estudien disciplinas científicas y permanezcan en este ámbito después de finalizar los estudios. En el Consejo de Competitividad de abril de 2005, los ministros propusieron a los Estados miembros que incrementaran la representación de las mujeres en los principales puestos de investigación, con el objetivo de alcanzar el 25 por ciento de cuota en el sector público. En su informe anual la Comisión afirma que la igualdad de género es fundamental para la Estrategia europea de crecimiento y empleo, aunque añade que los programas nacionales de reforma de los Estados miembros muestran una "visibilidad reducida y una pérdida de impulso en cuestiones de género". Además, cree que Europa necesita afirmar de nuevo su compromiso con el enfoque comunitario, combinando acciones positivas de carácter dominante con específicas, que estén respaldadas mediante mecanismos institucionales eficaces". Entre los retos que señala el informe figuran la completa explotación de la contribución de la política de género a la Estrategia europea para el crecimiento y el empleo, promoviendo la reconciliación eficaz del trabajo con la vida privada; y garantizando que los aspectos relativos al género se tengan en cuenta en las relaciones exteriores que mantiene la UE.