La UE introduce nuevas normas sobre las ayudas para incentivar la investigación, el desarrollo y la innovación
La Comisión Europea ha anunciado nuevas normas sobre la ayuda que desembolsan los Estados miembros a las empresas en concepto de proyectos de investigación, desarrollo e innovación. Las nuevas directrices permitirán a los Estados miembros «personalizar» sus fondos para impulsar la reactivación de la inversión del sector privado en investigación y desarrollo (I+D) siempre y cuando se orienten a subsanar un «fracaso determinado del mercado», tengan un «efecto de incentivo» y no «distorsionen excesivamente la competencia y el comercio». Si las medidas han sido elaboradas de acuerdo a estas directrices, la Comisión autorizará la ayuda con más rapidez que en las anteriores normas de ayuda estatal. La ayuda estatal está prohibida a no ser que sea específicamente autorizada por la Comisión de acuerdo a la legislación de la UE, ampliando el ámbito de la ayuda estatal para promover la I+D y la innovación en un esfuerzo por estimular la economía europea y cumplir con el objetivo de aumentar a un 3% del PIB el gasto en I+D para 2010. La Comisaria de Competencia de la UE, Neelie Kroes, declaró: «Gracias al nuevo marco de I+D+i de la Comisión, les será más fácil a los Estados miembros utilizar su ayuda estatal para incentivar los proyectos de I+D e innovación del sector privado. El Marco supone una importante contribución a la Estrategia de Crecimiento y Empleo». UEAPME, la Unión Europea del Artesanado y de la Pequeña y Mediana Empresa, celebró las propuestas ya que permitirán que la ayuda cubra los costes de patentes, los servicios de apoyo y la contratación de personal cualificado. La Comisión ha reclamado también por separado que se haga un uso más eficaz de los incentivos fiscales a favor de I+D con el fin de incentivar la cooperación transeuropea y la creación de empleo. Las propuestas de la Comisión ofrecen una «plantilla» para los planes nacionales de incentivación fiscal, y se basan en algunas de las mejores prácticas que ya hay puestas en marcha en los Veinticinco. Estas nuevas directrices entrarán en vigor a partir del 1 de enero de 2007.