Skip to main content
European Commission logo print header

Article Category

Noticias
Contenido archivado el 2023-03-06

Article available in the following languages:

Razones para la diferente tolerancia a la malaria de las personas

Un equipo de investigadores de Portugal y Estados Unidos ha demostrado la importante función desempeñada por una enzima antioxidante que se encuentra de forma natural en el cuerpo a la hora de ayudar a las personas a tolerar el parásito Plasmodium, causante de la malaria. Los ...

Un equipo de investigadores de Portugal y Estados Unidos ha demostrado la importante función desempeñada por una enzima antioxidante que se encuentra de forma natural en el cuerpo a la hora de ayudar a las personas a tolerar el parásito Plasmodium, causante de la malaria. Los resultados, cofinanciados por la Unión Europea y publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), ofrecen un nuevo enfoque para tratar esta enfermedad mortal. El estudio pertenece al proyecto Xenome («Ingeniería del genoma porcino para el estudio de xenotrasplantes en primates: un paso hacia la aplicación clínica»), financiado con 9,9 millones de euros a través del área temática «Ciencias de la vida, genómica y biotecnología aplicadas a la salud» perteneciente al Sexto Programa Marco (6PM) y su objetivo fue la investigación de nuevas aplicaciones sanitarias de los conocimientos adquiridos en el campo de la genómica. La malaria es una de las principales causas mundiales de muerte prematura, aunque si lo comparamos con el gran número de personas infectadas por el parásito Plasmodium, el porcentaje de fallecimientos (entre el 1% y el 2%) es relativamente pequeño. Después de todo, es importante para el parásito mantener vivo a su huésped. Se sabe que la tolerancia personal y la resistencia creada frente a la infección influye en la posibilidad de caer victima de la malaria. Sin embargo, hasta el ahora los conocimientos sobre el mecanismo que rige dicha tolerancia han sido escasos. Un equipo de investigadores dirigido por Miguel Soares del «Instituto Gulbenkian de Ciência» (Portugal) estudió ratones infectados con el parásito Plasmodium. Dicho equipo mostró cómo el parásito se multiplica en el interior de los glóbulos rojos de la sangre hasta que provoca su rotura y la liberación de hemoglobina (la proteína que transporta oxígeno al interior de las células) en el torrente sanguíneo. Como consecuencia, la hemoglobina circula con total libertad y libera sus grupos hemo (que contienen moléculas de hierro) en el torrente, lo que en ocasiones provoca resultados realmente devastadores. Entre las muchas estrategias que emplearon los ratones para contrarrestar este efecto, los investigadores observaron una producción superior de la enzima hemo oxigenasa 1 (HO-1), que descompone los grupos hemo. Descubrieron que los ratones infectados que producían grandes niveles de HO-1 quedaban protegidos contra el desarrollo de síntomas graves de malaria. Los resultados se confirmaron cuando los científicos administraron el fármaco antioxidante N-acetilcisteína (NAC) a los ratones y observaron el mismo efecto protector. El sistema hemo/HO-1 descrito por el equipo de investigadores aportó información sobre las formas cerebrales y no cerebrales de malaria grave, incluyendo aquellas que conducen en última instancia a un fallo multiorgánico. Cabe destacar que el estudio también demostró que el efecto protector de la HO-1 contra la libre circulación de hemoglobina aumenta la tolerancia del huésped a la infección del parásito Plasmodium. «La acción antioxidante de la HO-1 forma parte de la estrategia natural de defensa del huésped contra el parásito de la malaria», explicó el Dr. Soares. «Proporciona un potente efecto protector contra la malaria pero, sorprendentemente, no parece afectar de forma directa al parásito. En algunos casos, la reacción del huésped contra el parásito puede ocasionar la muerte del primero. El mecanismo protector que proporciona la HO-1 permite que la respuesta del huésped para matar al parásito se produzca sin comprometer su propia supervivencia.» Según el Dr. Soares, los resultados del estudio indican que los métodos alternativos para el tratamiento de la malaria no se deberían centrar en matar al parásito de forma directa, «sino en fortalecer el estado de salud del huésped para que éste pueda matar al parásito y sobrevivir». Este enfoque «debería proporcionar una protección potente contra formas graves de malaria y lograría así salvar vidas sin promover la aparición de cepas de Plasmodium resistentes », concluyó. Los investigadores esperan que esta misma estrategia se aplique a una amplia gama enfermedades infecciosas.

Países

Portugal, Estados Unidos

Artículos conexos