Revelar el papel que desempeñan los linfocitos T cooperadores foliculares y el centro germinativo sobre la menor eficacia de las vacunas en las personas mayores
La vacunación estimula el sistema inmunitario para que produzca anticuerpos y linfocitos T y B de memoria(se abrirá en una nueva ventana) que proporcionen protección contra infecciones posteriores. En las personas mayores, la respuesta inmunitaria a la vacunación es más limitada que en adultos más jóvenes, lo que reduce la producción de anticuerpos protectores y células de memoria inmunitaria. El proyecto TWILIGHT, financiado por el Consejo Europeo de Investigación(se abrirá en una nueva ventana), utilizó estudios de vacunación en humanos y trabajó con ratones para comparar las respuestas a la vacunación en individuos más jóvenes y más mayores. «Descubrimos que los ratones y los humanos más mayores tienen una respuesta alterada de los linfocitos T cooperadores foliculares y del centro germinativo después de la vacunación, pero que la https://academic.oup.com/cid/article/59/9/1246/421413 (estimulación adecuada puede corregir esta respuesta)», afirma Michelle Linterman del Instituto Babraham, entidad anfitriona del proyecto. Junto con el debatido uso del imiquimod(se abrirá en una nueva ventana) para potenciar la respuesta inmunitaria, el equipo también descubrió que potenciar el microbioma intestinal en los ratones más mayores aumentaba una respuesta inmunitaria en su intestino, un órgano especialmente susceptible al deterioro senil. Los hallazgos son directamente relevantes para la lucha contra la COVID-19: la edad es uno de los factores de riesgo más significativos a la hora de que se produzcan resultados negativos para la salud tras una infección por coronavirus del síndrome respiratorio agudo grave de tipo 2 (SARS-CoV-2). El equipo ha utilizado las habilidades y el conocimiento obtenido durante TWILIGHT para evaluar cómo funciona una de las principales vacunas contra la COVID-19 en cuerpos más mayores a fin de determinar la posibilidad de mejorar su inmunogenia en este grupo de edad. En la actualidad, este trabajo se está terminando para su publicación.
La importancia de la respuesta del centro germinativo
El centro germinativo es una microestructura especializada que se forma en los ganglios linfáticos y el bazo y que contiene células inmunitarias que responden a la infección o la vacunación. Estos linfocitos B y T CD4+ colaboran para producir células de memoria y células secretoras de anticuerpos de vida larga que pueden proporcionar protección contra infecciones posteriores. El equipo de TWILIGHT estaba especialmente interesado en un tipo celular de la población de linfocitos T CD4+ denominado linfocito T cooperador folicular(se abrirá en una nueva ventana). Estos linfocitos ayudan a los linfocitos B en el centro germinativo a convertirse en células secretoras de anticuerpos y linfocitos B de memoria para que luchen en infecciones futuras. Sin ellos, la respuesta del centro germinativo no puede actuar. TWILIGHT descubrió que, en lugar de los cambios en los linfocitos T cooperadores foliculares y los linfocitos B en sí mismos, una de las causas de la respuesta alterada a las vacunas era el microentorno envejecido circundante. «Esto fue una sorpresa y ha cambiado nuestra forma de pensar en el problema y los tipos de análisis necesarios para comprender el deterioro senil. Implica a las células que constituyen este microentorno —como las células inmunitarias innatas, las células estromales y los ganglios linfáticos— en el deterioro senil», explica Linterman. TWILIGHT mostró que, en los ratones de más edad, estaban alteradas las células dendríticas(se abrirá en una nueva ventana), que normalmente llevan antígenos(se abrirá en una nueva ventana) a los linfocitos T cooperadores foliculares para desencadenar una respuesta inmunitaria. Sin embargo, el equipo descubrió que esto podía corregirse mediante la aplicación de imiquimod(se abrirá en una nueva ventana), que estimulaba las células dendríticas para que volvieran a actuar.
Envejecimiento saludable
Dado que el envejecimiento viene acompañado de un deterioro funcional del sistema inmunitario, la susceptibilidad general a las infecciones se convierte en una causa importante de morbilidad y mortalidad en las personas mayores. Aunque la vacunación ha demostrado tener éxito a la hora de evitar enfermedades infecciosas, una inmunidad mermada conduce a mayores tasas de enfermedades evitables en personas mayores, incluso habiéndose aplicado unos buenos programas de inmunización. «Nuestro conocimiento puede ayudar a mejorar la eficacia de las vacunas en las personas mayores y así permitirnos a todos estar más sanos y ser más activos a lo largo de nuestras vidas», añade Linterman. El equipo está trabajando para comprender mejor los cambios celulares y moleculares específicos que se producen en el microentorno envejecido.