Objetivo: mares sin plástico Millones de toneladas de plástico se introducen anualmente en el entorno marino. El proyecto CLAIM, mediante tecnologías y herramientas innovadoras, aspira a proteger el agua frente a la contaminación por plásticos y mantenerla limpia y segura. Cambio climático y medio ambiente © Rich Carey, Shutterstock El aumento de la producción de plásticos durante los últimos cincuenta años ha causado problemas significativos de contaminación, tanto de los ecosistemas acuáticos como terrestres. Los restos de plástico se acumulan en ríos, mares y océanos en forma de macroplásticos (>5 mm) y microplásticos (<5 mm). Las especies marinas y costeras se enredan en los residuos plásticos o ingieren los microplásticos, cuyo aspecto es similar al del plancton, al confundirlos con alimento. De esta forma, los microplásticos pueden terminar en los seres humanos a través de la cadena alimentaria. Herramientas para detectar macro- y microplásticos La misión del proyecto CLAIM, financiado con fondos europeos, era tomar medidas contra la contaminación por plásticos mediante tecnologías innovadoras. George Triantafyllou, coordinador del proyecto y director de investigación en el Centro Helénico de Investigación Marina, subraya: «Nuestro objetivo era sentar las bases para un entorno marino saludable, libre de macro- y microplásticos, en los mares europeos mediante tecnología limpia». Los investigadores generaron un conjunto de herramientas que les permitió identificar los focos de residuos plásticos marinos. Estas incluían herramientas de modelización que tenían en cuenta las corrientes marinas, las olas y el viento para simular las rutas de los plásticos desde las fuentes terrestres al mar. Los datos de observación marina de los sistemas de FerryBox también demostraron ser un medio muy útil para recopilar la información que los los esfuerzos convencionales no podían cubrir. Además, el equipo de CLAIM desarrolló un sistema de filtrado pasivo que ofreció información sobre la distribución de la basura marina en el Mediterráneo y en el mar Báltico. Se ha utilizado a bordo de buques equipados con los sistemas de FerryBox o de otros sistemas de bombeo de agua marina de flujo continuo. Tecnologías sinérgicas contra los residuos plásticos marinos Para evitar que la basura flotante entre en el mar, el consorcio desarrolló el sistema CLEAN TRASH® que consiste en una serie de barreras flotantes diseñadas para imitar las utilizadas en los vertidos de hidrocarburos. Cuando el sistema se colocó en desembocaduras o estuarios de ríos, demostró una eficiencia superior al 95 % en la recogida de desechos plásticos, formados principalmente por el plástico y la espuma de poliestireno utilizados en envases. Los residuos recogidos por el sistema CLEAN TRASH® puede procesarse con un dispositivo de tratamiento térmico a pequeña escala conocido como pirolizador. Este aprovecha la alta temperatura proporcionada por plasma para transformar los residuos sólidos en gas combustible que puede utilizarse como fuente de energía para iluminación, calefacción o carga de baterías. El pequeño tamaño del pirolizador permite su utilización en puertos comerciales y deportivos, o en pequeños barcos o buques que limpian el mar de macroplásticos. El equipo de CLAIM también diseñó y fabricó una técnica de filtrado para atrapar todos los microplásticos en las plantas de tratamiento de aguas residuales y degradarlos aún más con la luz solar. La tecnología incluye un dispositivo de filtrado automático y un reactor fotocatalítico que emplea nanotecnología para facilitar la degradación del plástico cuando se expone a la luz. Sensibilizar sobre la contaminación marina por plásticos Las herramientas y tecnologías desarrolladas durante el proyecto ya están a disposición para su instalación inmediata. Además de ofrecer información convincente sobre la dispersión de los plásticos en el ecosistema marino, estas herramientas demostraron que la contaminación por plásticos en las zonas marinas protegidas de un país puede proceder de fuentes más allá de su jurisdicción nacional. Por tanto, es fundamental que los países europeos cooperen para mantener sus mares limpios y protegidos. El consorcio se aseguró de sensibilizar a la sociedad y las partes interesadas sobre el problema de los microplásticos en los océanos y la importancia de los ecosistemas marinos. También participó en la elaboración de informes para adaptar la legislación pertinente y ofrecer incentivos que respalden las medidas de mitigación para luchar contra la contaminación por plásticos en el mar. Palabras clave CLAIM, macroplásticos, microplásticos, modelización, pirolizador, filtrado de aguas residuales, FerryBox, CLEAN TRASH®
