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Mechanisms of bone marrow sequestration during malaria infection

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Un nuevo enfoque para parar la malaria

Unos investigadores esperan bloquear la capacidad del parásito de la malaria de replicarse y transmitir la enfermedad de humanos a mosquitos al actuar de manera específica sobre la médula ósea, lo que supondría un paso importante para desarrollar fármacos y vacunas que, en último término, podrían erradicar la malaria.

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La malaria, una enfermedad siempre grave y a menudo mortal que se transmite a través de mosquitos, constituye un importante problema de sanidad pública, sobre todo en los países en desarrollo. «Existe una necesidad urgente de desarrollar nuevos tratamientos para esta enfermedad tan persistente», comenta Matthias Marti, catedrático del Centro Wellcome de Parasitología Integral, parte de la Facultad de Infección e Inmunidad de la Universidad de Glasgow. Según Marti, el desarrollo de nuevos tratamientos comienza con un juego del escondite. «“Plasmodium falciparum”, el parásito de la malaria humana más mortal, sabe esconderse muy bien en diferentes nichos tisulares —explica el catedrático—. Una forma de frenar la propagación de la enfermedad consiste en atacar al parásito en su camino hacia este escondite o en el mismo escondite». Uno de sus escondites es la médula ósea. En la malaria, los síntomas clínicos están relacionados con el estadio del parásito que reside en los eritrocitos humanos. Estos estadios se desarrollan en la médula ósea, desde donde el parásito se libera a la circulación sanguínea. «El nicho extravascular de la médula ósea no solo constituye un escondite preferido para que los parásitos “P. falciparum” se multipliquen, sino que también sirve como una especie de escenario, donde los estadios de transmisión maduran antes de que los parásitos sean liberados a la circulación sanguínea y, finalmente, recogidos por un mosquito y transferidos a otro hospedador», agrega Marti. Este hallazgo, en el que Marti desempeñó un papel esencial en 2014, abrió la puerta a una plétora de nuevas preguntas. «¿Qué hace tan atractiva la médula ósea para este parásito? ¿Cómo puede no ser detectado por el sistema inmunitario?», se pregunta el investigador. El proyecto financiado con fondos europeos BoneMalar responde a estas preguntas.

Detener al parásito en su camino

Durante su trabajo en BoneMalar, que contó con el apoyo del Consejo Europeo de Investigación, Marti descubrió que el parásito utiliza el principal reservorio de eritrocitos en la médula ósea para reproducirse, aumentar su número durante la infección y producir las etapas de transmisión. El equipo de investigación corroboró este hallazgo con un modelo murino. «Logramos observar en vivo los estadios de transmisión mientras viajaban desde el nicho extravascular hacia la circulación sanguínea —apunta Marti—. Si podemos bloquear este proceso de transmigración, es posible que podamos detener al parásito en su camino y frenar la transmisión». El equipo del proyecto empleó el mismo modelo murino para llevar a cabo la primera investigación sobre el comportamiento de los parásitos en los órganos a nivel de célula única.

Un nuevo paradigma para la investigación de la malaria

El trabajo del proyecto BoneMalar ha dado lugar a un nuevo paradigma en la investigación de la malaria, que establece la médula ósea como el enclave principal del parásito durante la infección humana. Como resultado, se podrían emplear nuevas estrategias de tratamiento dirigidas a la infección de la médula ósea a fin de bloquear tanto la replicación del parásito como la transmisión de humanos a mosquitos. «Si podemos detener al parásito antes de que llegue a la médula ósea, o al menos atraparlo una vez que esté allí, podremos cerrar el ciclo de transmisión y reducir la carga del parásito», comenta Marti. «Lograrlo supondría un paso importante para desarrollar fármacos antipalúdicos más eficaces, nuevos marcadores de diagnóstico y, quizá, incluso una vacuna». El laboratorio de Marti ha obtenido dos nuevas subvenciones que se utilizarán para continuar el estudio del ciclo de transmisión y cómo esto podría servir como punto de partida para erradicar por fin la malaria.

Palabras clave

BoneMalar, malaria, médula ósea, mosquitos, vacunas, enfermedad, sanidad pública, infección, inmunidad, «Plasmodium falciparum», parásitos, fármacos antipalúdicos

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