European Commission logo
español español
CORDIS - Resultados de investigaciones de la UE
CORDIS

Translational quantitative systems toxicology to improve the understanding of the safety of medicines - Sofia: 116030

Article Category

Article available in the following languages:

Nueva información sobre la toxicidad provocada por fármacos

Muchos fármacos causan una toxicidad inesperada al llegar a los ensayos clínicos con personas, por lo que los científicos están integrando la modelización informática para predecir mejor cuándo esta podría producirse.

Salud icon Salud

Crear nuevos fármacos es difícil. La tasa general de éxito es baja: tan solo alrededor del 10 % de los nuevos posibles fármacos llegan finalmente al mercado. Uno de los motivos son las reacciones adversas —como la toxicidad— que pueden producirse de forma inesperada cuando los fármacos llegan a los ensayos clínicos con personas. «Muy a menudo se produce un efecto secundario en los primeros estudios con personas, lo que habría sido totalmente imprevisible», explica Christopher Goldring, catedrático de Farmacología y Tratamientos en la Universidad de Liverpool y coordinador científico del proyecto TransQST. En el proyecto TransQST, financiado con fondos europeos y por la industria, los científicos crearon un método innovador para predecir la toxicidad potencial de sustancias químicas de interés médico, que incorpora datos «in vivo» con modelización informática avanzada. El equipo de TransQST, un consorcio público-privado en el que participan veintitrés socios, se propuso demostrar que este tipo de modelización podía mejorar tanto la rapidez como la seguridad del desarrollo de nuevos fármacos.

Los desafíos del desarrollo de fármacos

La mayoría de los ensayos preclínicos se basan en estudios con animales, que acarrean implicaciones éticas y no se ajustan del todo a las pruebas con personas. Además, es muy difícil predecir la respuesta de cada persona a un nuevo fármaco. Y cuando se prueba un posible fármaco por primera vez, los investigadores deben averiguar cuál es la dosis óptima para obtener la máxima eficacia y evitar al mismo tiempo la toxicidad. «Tradicionalmente, para quienes llevan a cabo los primeros ensayos con personas, las pruebas iniciales de un nuevo fármaco, ha sido dificilísimo dilucidar cuál sería la primera dosis», añade Goldring.

Predicción de la toxicología en los órganos fundamentales

Para superar estos problemas, el equipo del proyecto TransQST centró sus esfuerzos en recopilar nuevos datos sobre los cuatro órganos más afectados por la toxicidad: el corazón, el hígado, los riñones y el aparato digestivo. «Existe un gran problema de toxicidad en el tubo digestivo», añade Goldring, aunque antes de este proyecto se carecía de datos sobre posibles reacciones tóxicas en esta parte del cuerpo. «En el caso del aparato digestivo, utilizamos métodos muy modernos para empezar a abordar el problema de cómo predecir la toxicidad en el tubo digestivo», explica el catedrático. El equipo empleó un modelo de organoide de última generación, en el que los tejidos pueden cultivarse en el laboratorio a partir de unas pocas células madre adultas. Esto les permitió probar sus nuevos métodos de modelización en distintas partes del tubo digestivo, incluidos el intestino y el estómago. Gracias a estos métodos, el proyecto pudo tanto mejorar los modelos existentes para el ensayo de fármacos como crear una serie de modelos nuevos. Más allá de este logro, el equipo del proyecto TransQST también recopiló grandes cantidades de datos para respaldar la creación de nuevas herramientas. Estas pueden identificar, cuantificar y predecir posibles mecanismos implicados en la toxicidad de los fármacos candidatos, y ahora socios del consorcio de la industria farmacéutica las están probando en evaluaciones de seguridad de medicamentos. Todos los modelos, herramientas y datos del proyecto se han puesto a disposición del público y se puede acceder a ellos a través del sitio web de TransQST.

Aprovechamiento de una colaboración de éxito

El equipo espera que un legado clave del proyecto sea una nueva red europea de formación en toxicología, ya que durante el proyecto se puso de manifiesto que se necesitan más científicos en este campo. «Algunas de nuestras empresas farmacéuticas están muy interesadas en aprovechar nuestros esfuerzos en este campo», señala el catedrático. Goldring elogia el éxito de la participación y colaboración de tantos socios diferentes, desde universidades, hospitales, centros de investigación a empresas farmacéuticas. Según el catedrático, fue «una colaboración muy sana, dinámica, y fructifera de científicos de las empresas farmacéuticas y otros destacados investigadores de toda Europa. Creo que servirá como catalizador de un cambio positivo en la naturaleza del desarrollo de fármacos».

Palabras clave

TransQST, fármaco, desarrollo, modelo, informática, consorcio, toxicología, órganos, tubo digestivo

Descubra otros artículos del mismo campo de aplicación