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Novel precision technological platforms to promote non-invasive early diagnosis, eradication and prevention of cancer relapse: proof of concept in the bladder carcinoma.

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Una tecnología pionera para el diagnóstico y el tratamiento precoces del cáncer

El diagnóstico y el tratamiento precoces del cáncer son esenciales para la supervivencia de los enfermos. En este sentido, se ha demostrado que una nueva tecnología revolucionaria permite identificar pequeños carcinomas de vejiga y, al mismo tiempo, erradicarlos.

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El carcinoma de vejiga es el décimo tipo de cáncer más común en el mundo y, cada año, afecta a cerca de medio millón de personas. Sin embargo, es uno de los tumores malignos más caros de tratar durante la vida de los enfermos. «Una de las razones de este gasto es su elevada frecuencia de recidiva», apunta el coordinador del proyecto EDIT, Massimo Alfano, del Hospital San Raffaele (Italia). «Los enfermos tienen que someterse a interminables seguimientos, tratamientos semanales y múltiples rondas de operaciones quirúrgicas. También se tienen que llevar a cabo cistoscopias, un procedimiento periódico que permite examinar el interior de la vejiga con un cistoscopio».

Retos en el abordaje del carcinoma de vejiga

Tal como sucede con otras enfermedades que implican un crecimiento tisular anómalo, la detección y el tratamiento precoces son esenciales para mejorar el desenlace clínico, las tasa de supervivencia y la calidad de vida de los enfermos. Así las cosas, el abordaje eficaz del carcinoma de vejiga se ha visto obstaculizado por dos necesidades clínicas aún no satisfechas. «La primera es que no existen técnicas de diagnóstico por imagen capaces de detectar masas anómalas de tejido con un tamaño inferior a 1 mm, lo que puede conllevar la resección incompleta del tumor y la presencia de enfermedad residual tras la intervención quirúrgica», explica Alfano. La segunda es que la terapia intravesical tras la intervención quirúrgica, a través de la cual se administra un tratamiento directamente en la vejiga con una sonda, fracasa en cerca del 50 % de los enfermos.

Enfoque «tratanóstico» para la atención del enfermo

El objetivo del proyecto EDIT, financiado con fondos europeos, era abordar estos retos mediante el desarrollo de una tecnología capaz de detectar y extirpar lesiones del carcinoma de vejiga con un tamaño inferior a 1 mm. La tecnología se diseñó para ser mínimamente invasiva y «tratanóstica», es decir, que combine el diagnóstico con el tratamiento. «Esto se logró integrando ecografía con imagenología fotoacústica —explica Alfano—. Como agentes de contraste, empleamos nanovarillas de oro, que se fabricaron de modo que fueran estables en presencia de orina». Alfano y su equipo consiguieron identificar una diana que se expresa en las células cancerosas de la vejiga pero no en las células sanas de la vejiga. Las nanovarillas de oro se combinaron con un péptido específico de este marcador tumoral. Se descubrió que la imagenología fotoacústica ofrecía una resolución muy alta. Al cambiar el tipo de luz láser empleada para irradiar las nanovarillas de oro, el equipo pudo administrar termoterapia y, al mismo tiempo, obtener imágenes.

Tratamiento revolucionario del carcinoma de vejiga

La viabilidad de esta tecnología se demostró satisfactoriamente en modelos preclínicos de carcinoma de vejiga. El consorcio EDIT logró demostrar que la introducción intravesical de nanovarillas de oro dirigidas podía llevarse a cabo de manera segura. «También pudimos probar cómo la obtención de imágenes fotoacústicas de nanovarillas de oro dirigidas permite detectar carcinomas de vejiga planos con un tamaño inferior a 0,5 mm —comenta Alfano—. Las nanovarillas de oro también ayudaron a inducir de forma eficaz necrosis en los carcinomas». Los resultados ponen de manifiesto el potencial clínico de esta tecnología para reducir la frecuencia de la recidiva del carcinoma de vejiga, al permitir diagnosticar y tratar esta enfermedad mucho antes de lo que era posible. Este hecho tendrá un efecto muy positivo en la calidad de vida de los enfermos y, al mismo tiempo, reducirá la necesidad de intervenciones quirúrgicas ulteriores. El consorcio EDIT también considera posible aplicar este enfoque tratanóstico en pequeñas lesiones en otros órganos humanos huecos. «El siguiente paso consistirá en llevar la tecnología de EDIT al ámbito clínico —agrega Alfano—. Esto supondrá su validación a través de ensayos clínicos. Estamos seguros de que la tecnología de EDIT cambiará de forma drástica el diagnóstico y el tratamiento del carcinoma de vejiga».

Palabras clave

EDIT, carcinoma, vejiga, diagnóstico, cistoscopias, fotoacústica, nanovarillas, intravesical

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