La educación fuera del aula ayuda a crear futuros solucionadores de problemas
Inspirar a los jóvenes para que estudien ciencias sigue constituyendo todo un reto. En la actualidad, las asignaturas de ciencias, tecnologías, ingenierías, artes y matemáticas (CTIAM) siguen considerándose como un «hueso» en las escuelas. Los modelos tradicionales y teóricos de enseñanza no siempre están diseñados para resultan atractivos. Con el objetivo de cambiar esta percepción, el proyecto financiado con fondos europeos OTTER reunió a educadores, científicos y creativos para diseñar de forma conjunta nuevas experiencias de educación fuera del aula (EOC, por sus siglas en inglés) centradas en la sostenibilidad medioambiental y la reducción de residuos plásticos.
Configurar la metodología de la educación fuera del aula
La metodología OTTER Lab se ideó inicialmente como un enfoque en cinco pasos, que adoptaba pedagogías centradas en el alumno, y fue diseñada por los profesores, con el apoyo de los representantes del equipo OTTER, en cuatro países de prueba: Irlanda, España, Hungría y Finlandia. Los profesores recibieron materiales de formación para diseñar experiencias de aprendizaje atractivas, que tuvieran fuertes vínculos entre los principios de diseño de laboratorios OTTER —Objetivos de Desarrollo Sostenible, competencias para el siglo XXI, así como inclusión y diversidad— y los planes de estudio de sus países. Las experiencias de aprendizaje se centraron en visitas a lugares fuera del aula para recopilar pruebas relacionadas con los objetivos de su laboratorio OTTER. Los profesores incluyeron elementos de preaprendizaje y posaprendizaje como apoyo a las visitas de EOC. Uno de los aspectos más novedosos de la metodología OTTER consistió en emplear las pruebas recopiladas fuera del aula para generar las iniciativas juveniles «Make an Impact». «En OTTER se empleó una metodología basada en datos empíricos, que combinaba información bibliográfica con experiencias prácticas en contextos educativos socioeconómicos muy dispares —explica Nathália Helena Azevedo, becaria de investigación del proyecto—. «Los inspiradores proyectos desarrollados por los alumnos en los laboratorios OTTER pueden constituir la base para el uso de metodologías similares como una pauta para promover la imaginación, los proyectos de colaboración dentro de las comunidades escolares y la reflexión sobre la interconexión entre los seres humanos, otras especies y el medio ambiente».
La evaluación como parte esencial de la investigación y la excelencia educativa
Un objetivo clave de la metodología OTTER era establecer un proceso continuo de seguimiento y evaluación en lugar de una única intervención. Las herramientas de evaluación tienen un doble propósito: informar sobre los resultados de la investigación y contribuir al aprendizaje de los alumnos. Además de mejorar el proceso de investigación, esta integración también aportó información de gran valor a los educadores. «Nuestros resultados revelan que este planteamiento requiere un aprendizaje profesional del profesorado específico y orientado. La planificación y la preparación tendrían que contar con tiempo (bloques específicos en el cronograma o cobertura de sustituciones) y recursos (como equipos sostenibles que se puedan utilizar en todas las clases y asignaturas) para que los maestros y las partes interesadas puedan colaborar y diseñar experiencias de aprendizaje enriquecedoras», comenta Deirdre O'Neill, becaria de investigación del proyecto. «Nos gustaría que existieran incentivos que animaran a las industrias, las comunidades y los líderes escolares a adoptar esta metodología y ofrecer su apoyo pleno a los maestros».
Cambiar el ecosistema educativo
Los hallazgos del proyecto se emplearán para elaborar un borrador de protocolo que garantice la calidad de las actividades de EOC, a fin de crear un marco de acreditación para ellas. «Pretendemos que las directrices ayuden a las partes interesadas en la acreditación a establecer un sistema de acreditación de EOC. Esto proporcionará información detallada sobre quién y qué debe acreditarse, por qué una organización debe solicitar la acreditación, los criterios que deben evaluarse, el desarrollo ulterior a la acreditación y el mantenimiento de la condición de acreditado», concluye Jelena Kajganovic, coordinadora del proyecto. «Nuestro objetivo es construir un ecosistema educativo en Europa a través de un conjunto diverso de lugares, promoviendo una educación de calidad para todos».
Palabras clave
OTTER, sostenibilidad, experiencia de aprendizaje, educación formal, educación informal, reducción de plásticos, educación fuera del aula
