Sistemas agropecuarios y agroforestales mixtos para aumentar la resiliencia climática
Los sistemas agropecuarios y agroforestales mixtos (MiFAS, por sus siglas en inglés) buscan integrar la biodiversidad y la conservación de la naturaleza mediante la diversificación de la producción. En la práctica, ello implica que cultivos, árboles y animales compartan campos, explotaciones o paisajes, con el fin de optimizar los recursos y garantizar que los distintos elementos se beneficien mutuamente. Por ejemplo, la vegetación leñosa proporciona refugio a los animales y, a su vez, se beneficia de su estiércol. Esta vegetación captura a su vez más carbono de la atmósfera y fomenta un aumento de la biodiversidad, atrayendo más polinizadores al lugar y mejorando el crecimiento de los cultivos.
Colaboración con los agricultores
Sin embargo, los MiFAS plantean algunos retos. Esta práctica resulta más compleja y requiere un mayor conocimiento que otras técnicas agrícolas, y puede conllevar una mayor inversión. Para abordar esta cuestión, el proyecto MIXED(se abrirá en una nueva ventana), financiado con fondos europeos, constituyó un amplio consorcio de especialistas y partes interesadas del sector, con el fin de promover el desarrollo de los MiFAS mediante un análisis de los beneficios económicos y ambientales, así como de las estrategias para una transición satisfactoria. El equipo del proyecto reconoció que la eficiencia y la resiliencia de los MiFAS solo se lograrán a través de la colaboración con los agricultores y la comprensión de los contextos locales y generales en los que desarrollan su actividad.
Creación de redes de conocimiento sobre MiFAS a nivel europeo
Durante los cuatro años de duración del proyecto, el equipo estableció redes de conocimiento para los MiFAS en toda Europa, abarcando la amplia variedad de estos sistemas existentes. También desarrolló un corpus de conocimientos científicos disponible para los agricultores. En MIXED se crearon redes de agricultores ecológicos y convencionales para aprovechar diferentes corpus de conocimiento. Se colaboró con grupos de agricultores y otras partes interesadas para desarrollar estas redes y favorecer el intercambio de conocimientos, promover actividades conjuntas y favorecer la adopción generalizada de los MiFAS a nivel europeo.
Los MiFAS contribuyen a la sostenibilidad ambiental
El equipo del proyecto obtuvo una amplia variedad de resultados, que se presentan en un informe principal(se abrirá en una nueva ventana) sobre el estado actual de los MiFAS en Europa y los supuestos futuros. Las conclusiones del informe sugieren que los MiFAS ofrecen a los agricultores más estabilidad y resiliencia que las prácticas agrícolas especializadas (que, a corto plazo, pueden proporcionar mayores rendimientos), al contribuir a mantener la producción frente a diversos factores de estrés y retos. Esto se debe a que los sistemas MiFAS contribuyen a la sostenibilidad ambiental a largo plazo, ya que aumentan la captura de carbono, fomentan la biodiversidad y mantienen la productividad agrícola. Se registraron efectos positivos tanto en términos de resiliencia como de eficiencia. Entre ellos destacan: los sistemas silvopastorales en Dinamarca, donde los sauces proporcionaron una dieta rica en proteínas a los cerdos de la ganadería ecológica; un proyecto británico que combinó el pastoreo de ovejas con la producción de cereales, en el que se observó que los nuevos cultivos de cobertura y el estiércol de las ovejas mejoraban la estructura del suelo, la biodiversidad y la captura de carbono; y la plantación de árboles en las lindes de los campos en Polonia, lo que favoreció la biodiversidad edáfica, aumentó el contenido edáfico de humedad y redujo la temperatura del suelo, incrementando así la productividad de los cultivos. Por ello, los investigadores sugieren que el concepto de eficiencia agrícola debe adoptarse desde una perspectiva a largo plazo y considerar la resiliencia como un medio para mantener el rendimiento en el futuro.