Menos contaminantes en las emisiones de los aviones
Cuando vuelan a gran altura, aviones y helicópteros emiten diversas substancias nocivas, como los NOx, que se consideran responsables de problemas medioambientales importantes. No sólo afectan a la calidad del aire en la región, también pueden tener un impacto significativo en el clima global. Está demostrado que la acumulación siempre creciente de estos óxidos, entre otros, en la atmósfera superior es responsable de fenómenos nocivos para el medio ambiente, como el efecto invernadero. Como respuesta, este proyecto se ha centrado en el estudio de las posibilidades de las tecnologías de baja emisión de NOx en distintos combustores empleados en motores de aeronaves. Respetando las regulaciones de la Organización de Aviación Civil Internacional, el objetivo era lograr una reducción del 60%. Se han estudiado combustores modulares y a escala real, cubriendo los diferentes tamaños y condiciones de operación de motores pequeños, medianos y grandes. Los resultados mostraron que con los motores pequeños podían alcanzarse reducciones del 50%, mientras que con los medianos se podría lograr el objetivo del 60%. En lo que a grandes motores se refiere, el estudio tuvo que resolver problemas inesperados. De todos modos, los resultados deducidos fueron satisfactorios para los módulos que emplearon el método de mezcla pobre premezclada y prevaporizada (LPP, "Lean Premixed Prevaporised") para sistemas de inyección. Además, también se estudiaron los aspectos relacionados con la refrigeración y las posibilidades del método de combustión de mezcla pobre muy quemada y rápidamente enfriada (RQL, "Rich Quenched Lean"). Además, un estudio genérico tan puntual ha facilitado el desarrollo y la evaluación de nuevos modelos de herramientas analíticas, tecnologías y diseños avanzados para la optimización de LPP y combustores. Se han desarrollado códigos de dinámica de fluidos computacional (CFD) que pueden mejorar la precisión y la fiabilidad de la evaluación de las distintas tecnologías de combustores. Este proyecto, en el que participan seis fabricantes de motores de aviación y dieciséis organizaciones de investigación, puede contribuir significativamente al crecimiento futuro del transporte aéreo sin efectos medioambientales negativos.