Sensor desechable para transplante de organos
Un órgano que va a ser transplantado tiene un plazo fijo de viabilidad, que se establece atendiendo al peor de los casos. No obstante, en muchas ocasiones esto hace que se descarte un órgano viable cuando el plazo de caducidad ha vencido. El seguimiento continuo del órgano no sólo permitiría garantizar su plazo de viabilidad sino la evaluación de su comportamiento durante su conservación, transporte y el período postoperatorio inicial. En el marco del proyecto europeo, MICROTRANS, se ha desarrollado una nueva microsonda multisensorial, hecha de silicio, que permite controlar de forma constante el órgano que se va a transplantar. El uso de las tecnologías microelectrónicas en la fabricación de las microsondas ofrece una alta fiabilidad y unos costes muy bajos, al mismo tiempo que se consigue controlar la viabilidad del órgano obteniendo la temperatura ideal y el aislamiento patógeno del mismo durante el transporte. La microsonda incluye detectores de temperatura, pH, potasio e impedancia, que constituyen los principales parámetros para la evaluación del estado fisiológico de los órganos vivos. El cumplimiento de las directrices sobre dispositivos médicos para la biocompatibilidad y la seguridad eléctrica permitió utilizar la microsonda en ensayos clínicos y experimentales. La validación del sistema se realizó mediante un sistema de instrumentación personalizado, desarrollado en el marco de MICROTRANS, para su uso tanto en el ámbito clínico como en experimentos dentro del cuerpo. El sistema presenta una arquitectura modular, con distintos módulos para cada parámetro de interés, y ofrece gran flexibilidad para las distintas clases de detectores y tecnologías que se puedan usar. El software para el procesamiento (filtrado y calibrado), el control, la visualización y el almacenamiento de los datos que envían los distintos módulos se ha desarrollado de acuerdo con la plataforma de software Lab View. Se han realizado varios trabajos experimentales, tanto in vitro como in vivo, para comprobar el comportamiento del sistema, mostrando unos resultados esperanzadores. El sistema electrónico multisensorial hecho de silicio para la medición in-vivo de distintos parámetros abre nuevos caminos en el control in-situ de injertos, ampliando así el número de injertos disponibles y sus posibles destinos.