Toma de decisiones relativa al riego con ayuda de modelos matemáticos
El agua es un recurso escaso y de gran valor que posibilita el bienestar y el desarrollo. En el caso del riego de cultivos, resulta aún más importante si se tiene en cuenta que el riego de cultivos se produce generalmente en las regiones más áridas, como el Mediterráneo. Para resolver este problema, el proyecto utilizó tres dimensiones: impacto económico, impacto social e impacto medioambiental. Lo que resulta primordial en cada uno de estos aspectos no es la idea ortodoxa de la rentabilidad, sino cómo medirla en términos de sostenibilidad. Para conseguir estos objetivos múltiples, una colaboración de universidades europeas ha empleado estudios compuestos por 11 modelos de granjas estáticas. Se tuvieron en cuenta muchos factores para las estrategias de toma de decisiones de la función de utilidad sustituta. Esta función de utilidad contribuye a calcular cuánta agua se necesita para la producción de cultivos bajo riego. Algunos de ellos incluyen el impacto de los cambios en los precios de los productos del agua. Todos los factores tienen en cuenta tres objetivos: maximización de beneficios, minimización de riesgos y minimización de los gastos de mano de obra. Estos modelos matemáticos pueden imitar los patrones de comportamiento de los agricultores, por lo que son también capaces de pronosticar las consecuencias de los cambios en la política de precios del agua y la agricultura en el futuro.