Moldes de la nueva era para la industria del hierro
El polvo de carbón es un aditivo utilizado en la arena verde (arena de moldeado cubierta de arcilla). En la mayoría de las fundiciones se añade polvo de carbón a la arena de bentonita para lograr una superficie fundida sin arena. Esto ayuda a reducir la tendencia a la rotura en el moldeado y a promover la descomposición del molde durante la reorganización del vaciado. Aunque el carbón tiene muchas ventajas, se sabe también que provoca unas emisiones muy perjudiciales, como el monóxido de carbono, benceno y polvo, sobre todo en temperaturas de fundición de 1350°C. Se buscaba por tanto una forma de crear moldes más respetuosa con el medio ambiente. El adherente Bentonita es una arcilla compuesta por un 70-90% de montmorilonita que se puede reutilizar en un sistema de arena de ciclo y que no causa emisiones nocivas. Los experimentos con arena de bentonita sin añadir carbón dieron unos resultados positivos. Se puede quedar más arena en la superficie del molde y reducir las emisiones nocivas en un 50% o más. De este modo, se puede conseguir un entorno de trabajo más limpio y saludable para las fundiciones de hierro. Además, puede reducir la contaminación de los restos de arena, haciendo que estos residuos sean más apropiados para su reutilización en otras industrias.
