Una nueva era para los materiales de injertos óseos
Encontrar los materiales de injertos óseos adecuados no es siempre fácil. El uso de materiales sintéticos de injertos óseos (SBGM, por sus siglas en ingles) se está convirtiendo en una alternativa atractiva frente a los autoinjertos y aloinjertos, que se ven limitados por una serie de problemas tales como el dolor prolongado y la idoneidad del donante. El proyecto PORELEASE, financiado con fondos comunitarios, se centró en el estudio de SBGM genéticos como material de andamiaje para el crecimiento celular. Uno de los socios del proyecto, Hi-Por Ceramics, estudió en concreto los materiales de andamiaje fabricados con biocerámica. La empresa desarrolló un nuevo proceso para medir el tamaño de los poros en distintas muestras de estos materiales. El método común utilizado para generar datos sobre la distribución del tamaño de los poros es el análisis de imágenes. No obstante, el análisis de imágenes es un método complejo que requiere un equipo especializado y que puede generar resultados confusos en determinados casos. La nueva técnica se basa en pruebas de permeabilidad del gas y es mucho más sencillo. El método produce una dimensión para el diámetro de un capilar cilíndrico equivalente, basándose en una aproximación idealizada de la estructura porosa. La realización de estudios adicionales podría arrojar resultados, probablemente más fiables que los que produce el análisis de imágenes. Esta innovadora propuesta podría constituir la base de un nuevo proceso de control de calidad.