La cooperación en materia de investigación con los países en vías de desarrollo
La Comisión Europea ha adoptado una comunicación sobre la cooperación con los países en vías de desarrollo en el campo de la ciencia y la tecnología. En esta comunicación se hace hincapié en el hecho de que la cooperación en el ámbito de la ciencia y la tecnología constituye una parte estratégica de las políticas comunitarias de cooperación en materia de desarrollo. Esta comunicación es consecuencia de una comunicación general sobre la cooperación internacional en materia de investigación y desarrollo adoptada en 1995. A raíz de ésta, la Comisión acometió la tarea de elaborar comunicaciones específicas sobre la cooperación con el grupo de países objetivo. En la comunicación se esbozan los desafíos a los que se enfrentan los países en vías de desarrollo: los problemas de la sociedad; la capacidad de los países para mejorar el nivel de vida; y, por último, su aptitud para aprovecharse de las nuevas oportunidades que ofrece la globalización del comercio. A continuación, se analiza en la comunicación la situación de las infraestructuras de IDT en los países en vías de desarrollo. Es de destacar que el nivel de inversiones en materia de IDT se considera insuficiente y que estos países no cuentan con la infraestructura adecuada para solucionar el gran número de problemas al que se enfrentan. A fin de presentar sus propuestas de estrategia para una cooperación futura, la Comisión ha utilizado sus experiencias en las últimas iniciativas y políticas, tanto en Europa como dentro de los propios países en vías de desarrollo. La nueva estrategia se fundamentará en principios de asociación, diferenciación de necesidades y un enfoque integrado para la solución de problemas específicos. Asimismo, esta nueva estrategia supondrá acciones coordinadas en tres frentes: a un nivel institucional, en lo relativo a la capacidad de investigación de los diferentes países, y, por último, en lo referente a la cooperación con las entidades externas. Las autoridades públicas en los países en vías de desarrollo, los donantes europeos y el sector privado deberán llevar a cabo acciones. A nivel comunitario, deben utilizarse dos instrumentos independientes de forma coordinada. Nos referimos a los instrumentos financieros de la UE para terceros países - en particular, la Convención Lomé, el programa MEDA y el fondo de ayuda para América Latina ALA - y el programa marco en materia de IDT de la Comunidad. La IDT debe desempeñar un papel más importante en la cooperación de la UE con los países en vías de desarrollo, y, al mismo tiempo, es necesario consolidar y diversificar la cooperación científica y tecnológica. La Comisión añade que se debe garantizar una mayor cooperación entre las políticas comunitarias, y, a la vez, las acciones comunitarias deben complementar las actividades de los Estados miembros. La comunicación señala una serie de áreas prioritarias en materia de cooperación: - la gestión de los recursos naturales y la agricultura, la pesca y la agroindustria; - la salud; - la demografía y las cuestiones de población vinculadas a la urbanización; - la energía; - la tecnología de la información y las comunicaciones. La Comisión desea promover un debate en el contexto de la preparación del V Programa Marco en materia de IDT y el Libro Verde, recientemente publicado, sobre el futuro de las relaciones con los Estados en Africa, el Caribe y el área del Pacífico. También desea recalcar que la cooperación en materia de IDT debe ser considerada una parte de la estrategia general de cooperación de la Unión y, por otro lado, se reconoce la importancia de la asociación con los países en vías de desarrollo para elaborar estrategias de cooperación.