Sedimentos lacustres revelan el futuro de los Alpes
El conocimiento más preciso sobre los cambios medioambientales permite comprender mejor el impacto ecológico en los lagos, el suministro de agua y la energía hidroeléctrica y el turismo invernal. Además, los datos obtenidos pueden compararse con las reconstrucciones existentes de las temperaturas estivales para investigar cambios en la variabilidad anual de las temperaturas. Los investigadores del proyecto CLASS han tomado muestras de dos lagos, uno en los Alpes suizos y otro en el centro de Suecia. Los científicos del lago suizo se centraron en el periodo de los últimos 1 000 años y compararon un periodo especialmente caluroso conocido como la «anomalía del periodo cálido medieval» con otro periodo frío denominado «pequeña edad de hielo». Los resultados del lago sueco se limitaron al periodo 1946-2005 DC y compararon cuidadosamente estos datos con los datos meteorológicos. Las reconstrucciones se llevaron a cabo gracias a algas crisofitas, que producen elementos basados en silicio conocidos como quistes crisofíceos. Los quistes crisofíceos permanecen en los sedimentos de los lagos y pueden analizarse minuciosamente por medio de un microscopio electrónico de barrido. Las algas son sensibles a la desaparición del hielo del lago, que a su vez está correlacionada con las temperaturas del aire medias de octubre a abril. El equipo de CLASS ha logrado diseñar una metodología para la reconstrucción del clima de las estaciones frías. Esto ha dilucidado una serie de parámetros climáticos, entre ellos la variabilidad de la temperatura a largo y a corto plazo. Los resultados del proyecto revelan una fuerte correlación con los patrones de circulación de las corrientes oceánicas, conocidos como la Oscilación del Atlántico Norte (NAO), que controla las precipitaciones y las temperaturas invernales locales. El conocimiento adquirido sobre el impacto de la NAO en regiones montañosas sensibles de Europa facilitará a los responsables políticos y a la comunidad científica la tarea de prepararse frente a futuros cambios climáticos. De este modo podrán tomar las medidas más oportunas para tratar de mitigar los efectos nocivos.