Lecciones del firmamento
Los cielos que se pueden contemplar desde la Tierra ofrecen algo más que un panorama de gran belleza. También constituyen un auténtico laboratorio para la física, la astronomía, la cosmología y muchas otras disciplinas científicas. Con el objetivo de ilustrar a la generación más joven sobre la naturaleza del Universo y sus enigmas, el proyecto financiado con fondos europeos Sky Watch («Introducción de la juventud europea al mundo de la investigación científica mediante el uso interactivo de una red global de telescopios robóticos») propició la organización de un certamen en Internet orientado a la selección de los mejores proyectos en este campo. Las actividades del proyecto dieron impulso a la ciencia y la tecnología a través de la astronomía y crearon un espacio para la interacción entre colegios, centros de investigación y parques científicos. Se facilitó la asistencia de jóvenes a distintos eventos, tales como jornadas de ciencia, y se creó un portal en Internet para que los participantes pudieran informarse sobre los cielos y tomaran parte en el certamen. El proyecto dio comienzo en 2005, y para mediados de año ya habían visitado el sitio web más de 4 000 personas de 53 países. Las entidades asociadas al proyecto procedían de Alemania, Francia, Grecia, Suecia y Reino Unido. Todas contribuyeron a los esfuerzos a escala local y global por promocionar el proyecto. Curiosamente, fue en Grecia donde el proyecto suscitó más interés, puesto que el 57 % de los visitantes de la página web procedieron de dicho país, seguidos por un 10 % provenientes del Reino Unido y un 6 % de Alemania. Según las estadísticas recabadas, el 81 % de los visitantes del portal accedieron al mismo de forma directa, y no desde otros sitios, lo cual pone de relieve la eficacia de las labores de difusión y promoción realizadas en Sky Watch. La participación en el certamen también fue elevada, puesto que concursaron 95 equipos de 30 países. En total se presentaron 53 proyectos que cumplían los requisitos, de entre los que se seleccionaron 11 en primera instancia y, de éstos, 2 ganadores. Tanto el certamen como el portal constituyen dos ejemplos excelentes de formas de suscitar el interés por la ciencia entre los jóvenes, lo que contribuye a la construcción de una economía basada en el conocimiento y a la obtención de una juventud mejor formada en Europa.