Una herramienta de evaluación preliminar para reducir la experimentación animal
Múltiples productos químicos industriales de uso común no han sido sometidos a ensayos toxicológicos o clasificados según su grado de seguridad. En respuesta a la acuciante necesidad de desarrollar métodos alternativos para clasificar de forma rápida tanto los compuestos que se utilizan en la actualidad como los venideros, nueve socios de cinco países europeos pusieron en marcha el proyecto CHEMSCREEN , dotado con fondos de la UE. Con las miras puestas en evitar el uso de animales en los ensayos sobre toxicidad reproductiva, el consorcio creó una herramienta de evaluación in silico (mediante ordenador) sencillo y rápido que permita cumplir con los plazos fijados en el reglamento europeo relativo al registro, la evaluación, la autorización y la restricción de las sustancias y los preparados químicos (Reglamento REACH). Gracias a la capacidad que ofrece la informática, resulta posible realizar —en un breve lapso de tiempo— una evaluación preliminar de las estructuras molecular y química de las nuevas sustancias químicas, que se comparan con las toxinas conocidas. Según los diversos efectos probables a nivel tóxico, genotóxico o carcinogénico, se realizan los ensayos in silico e in vitro correspondientes para clasificar los productos de forma aún más minuciosa. CHEMSCREEN desarrolló una prueba de evaluación de alto rendimiento para determinar la toxicidad reproductiva que identifica, con un 100 % de precisión, compuestos perturbadores del sistema endocrino, también conocidos como alteradores endocrinos, cada vez más abundantes. Esta prueba también permite identificar agentes que causan malformaciones en los órganos reproductores con una precisión del 87 %. La plataforma de ensayos permite identificar la posible presencia de toxinas reproductivas o que afecten al desarrollo antes de emprender los ensayos in vivo, lo que se materializará en un incremento de la efectividad y eficiencia (esto es, una reducción) de la experimentación animal. Los científicos integrantes del proyecto también han desarrollado métodos para integrar la información obtenida en los análisis químicos —tanto in vitro como in silico— con los datos de referencia mediante una variedad de bases de datos. Gracias a la promoción ininterrumpida de los instrumentos de evaluación in silico y a la sucesión de demostraciones destinadas a los organismos reguladores para conseguir una amplia aceptación, los científicos de CHEMSCREEN van bien encaminados en su intento de reducir de forma significativa tanto el número de ensayos con animales como los costes de experimentación. La posibilidad de realizar ensayos toxicológicos con celeridad hará que todos los productos químicos que se utilizan en la actualidad estén sometidos a una evaluación adecuada. También facilitará la pronta clasificación de todos los nuevos derivados en pos de la seguridad y el bienestar de los ciudadanos de la Unión Europea y de la protección del medio ambiente.
