Implantes intraoculares biodegradables frenan la muerte de células ganglionares de la retina
El glaucoma afecta al nervio óptico y se caracteriza por la degeneración de los axones y los cuerpos celulares del nervio óptico (células ganglionares de la retina o CGR). Dado que la muerte de las células neuronales es irreversible y conduce a la ceguera, reducir su progresión ofrece la posibilidad de inhibir el daño por glaucoma en el nervio óptico. El proyecto financiado por la Unión Europea VISION (Prolonged inhibition of semaphorine3a pathway via a bio-degradable implant towards a better therapy for visual sensory impairments) desarrolló un implante biodegradable que libera de manera lenta compuestos que inhiben la muerte de células neuronales para prevenir la aparición de ceguera como consecuencia del glaucoma. Este objetivo se logró actuando de manera específica sobre el Semaphorin 3A (Sema3A), una proteína que participa en las rutas de guía axonal y que, además, es capaz de inducir la muerte celular programada en células neuronales. Los investigadores descubrieron que una pequeña molécula peptoide inhibidora de Sema3A reducía la muerte de las CGR. Seguidamente, estos generaron bibliotecas de compuestos químicos de este derivado peptoide e identificaron un análogo denominado CSIC002, que tiene propiedades prometedoras como compuesto cabeza de serie. Asimismo se descubrió que la supresión de Sema3A empleando anticuerpos específicos como Fab 3H4 inhibía la ruta apoptótica. El equipo de VISION desarrolló dos clases de inhibidores de Sema3A, a saber: compuestos de bajo peso molecular (PM) y anticuerpos dirigidos a Sema3A. Empleando las técnicas de electrohilado y extrusión, el equipo logró desarrollar implantes a base de polímeros biodegradables cargados con CSIC0002 y Fab 3H4 para la inhibición de Sema3A. Estudios in vivo en ratones, conejos y ratas demostraron de manera fehaciente que estos implantes ejercían un efecto protector en las CGR sin reacciones tóxicas o inflamatorias. En la actualidad, los investigadores están diseñando un ensayo clínico de fase IIB de tres meses de duración en Europa para evaluar su sistema de administración farmacológica basado en un implante polimérico y un inhibidor de Sema3A. Dado que estos polímeros han recibido previamente el visto bueno de las autoridades reguladoras para su empleo en dispositivos médicos, la aprobación de su comercialización no debería ser muy difícil. El estudio VISION ha revelado el potencial efecto terapéutico de su sistema de implante en diferentes enfermedades, incluyendo la lesión aguda del nervio óptico, la neuropatía isquémica óptica y el glaucoma. Aunque el proyecto ha finalizado, se están realizando esfuerzos adicionales para comercializar este producto en aras de beneficiar a millones de personas que padecen estas patologías que provocan ceguera.
Palabras clave
Biodegradable, implante intraocular, glaucoma, VISION, Semaphorin 3A, CSCI002, Fab 3H4