El Hubble revela choques supersónicos nunca vistos
Gracias al telescopio espacial Hubble de la NASA y la Agencia Espacial Europea (AEE), un grupo de astrónomos españoles y estadounidenses ha conseguido observar por primera vez complejas estructuras de gas en nebulosas planetarias, pronosticadas por la teoría astronómica. Una nebulosa planetaria, o nube de gas, se origina cuando estrellas moribundas expulsan material gaseoso en direcciones opuestas y a gran velocidad. Esto sucede cuando se encoge el interior de la estrella y hace erupción, expulsando las partes exteriores. La fuerza de esas expulsiones, que pueden alcanzar velocidades de hasta millón y medio de kilómetros por hora, puede dar lugar a ondas de choques supersónicos. Con el tiempo, nuestro propio sol morirá en circunstancias similares, dentro de 5.000 millones de años. Científicos del Observatorio Astronómico Nacional (España) y del estadounidense "Jet Propulsion Laboratory" (laboratorio de propulsión a chorro) observaron flujos de gas en la nebulosa del Huevo Podrido, nebulosa protoplanetaria que circunda una estrella fría y moribunda. Los científicos pudieron contemplar ondas de choques formadas por el impacto de chorros de gas a alta velocidad expulsados por la estrella. Aunque hace tiempo que los cálculos informáticos han pronosticado la existencia y la estructura de tales choques, las pruebas observadas hasta el momento han sido escasas. Esta nueva imagen del Hubble ha servido para documentar los choques con un grado de detalle impresionante. Mediante el uso de filtros que sólo dejan pasar la luz del hidrógeno ionizado y los átomos de nitrógeno, los astrónomos pudieron distinguir las partes más calientes del gas calentado por los violentos choques y han descubierto que forman una compleja burbuja doble. Según explicó Valentín Bujarrabal, del Observatorio Astronómico Nacional: "Ésta es la primera vez que se ven tan claramente estos componentes del choque en una nebulosa de estas características. Las imágenes profundas y de alta resolución muestran la compleja estructura de los choques con gran detalle, que ahora podemos comparar con las predicciones de los modelos informáticos". La imagen del Hubble fue tomada poco antes de las Navidades de 2000 con la cámara WFPC2. El telescopio espacial Hubble es un proyecto internacional en el que participan la AEE y la NASA.