La Comisión actúa contra cinco Estados miembros por incumplir el reglamento sobre el acceso al bucle local
La Comisión Europea ha iniciado un procedimiento de infracción contra cinco Estados miembros por incumplir el reglamento sobre el acceso al bucle local. La acción surge tras el fracaso de garantizar que la oferta de referencia de los operadores tradicionales sea completa y suficientemente detallada, como se estableció en el "Reglamento sobre el acceso al bucle local". Los cinco Estados miembros que tendrán que hacer frente a los procedimientos de infracción son Alemania, Francia, Irlanda, Países Bajos y Portugal. La referencia ofrecida por los operadores debería dar suficiente acceso como para permitir a los competidores pagar únicamente por lo que demandan, y deberá proporcionar un desglose de los costes para el sub-bucle, de tal forma que un operador pueda instalar un equipo más próximo a las instalaciones del cliente que al intercambio local. "Los reguladores y operadores han tenido tiempo de aplicar los requisitos del reglamento de la UE, y no puede haber más retrasos en la apertura del mercado del acceso local a la competencia. La acción que hemos emprendido ha producido resultados inmediatos, y espero que las autoridades nacionales puedan actuar con celeridad para resolver los problemas que estamos solucionando en esta reciente decisión sobre el acceso", declaró el Comisario europeo de Empresa y Sociedad de la Información, Erkki Liikanen. Estos procedimientos tienen como precedente las acciones adoptadas contra Alemania, Portugal y Grecia en diciembre de 2001, relativas al acceso compartido al bucle local. Desde entonces, Portugal y Grecia han puesto remedio a este problema concreto y la Comisión está actualmente cerrando los casos. Alemania ha dado recientemente indicios positivos para subsanar la situación, y la Comisión está asimismo considerando cerrar el caso. El reglamento sobre el acceso al bucle local fue adoptado en diciembre de 2000, y está diseñado para aumentar la competencia relativa a la provisión del acceso a la banda ancha local, al tiempo que proporciona un acceso a Internet de alta velocidad. En un informe de implantación en noviembre de 2001, la Comisión señaló que el avance había sido desalentador, y cuatro semanas más tarde inició la primera ronda de procedimientos de infracción para garantizar una mayor rapidez en los avances.