La EBS expone a los políticos la realidad empresarial, en palabras del fundador de la cumbre
Según el Comisario europeo de Investigación, Philippe Busquin, la Cumbre Europea de la Empresa (EBS) es "la plataforma ideal" para el diálogo entre los protagonistas de la investigación y la innovación. Sin embargo, el fundador y director gerente de la cumbre, Didier Malherbe, espera que pronto llegue el día en que no sea necesario organizar este evento bienal. Al hilo de los últimos preparativos para la cumbre de este año, que se celebrará los días 11 y 12 de marzo en Bruselas, CORDIS Noticias habló con el Sr. Malherbe y le preguntó por qué considera que el evento se ha convertido en un punto de referencia para los empresarios y los políticos si hasta ahora sólo se han celebrado dos ediciones. "A pesar de los objetivos de unos y otros pueden ser compatibles, los principales empresarios y políticos viven realidades diferentes", comenzó diciendo el Sr. Malherbe. "En última instancia, los empresarios están ahí para ganar dinero, mientras que los políticos se centran más en el crecimiento y el empleo que normalmente genera la rentabilidad". Por tanto, explicó, el objetivo principal de la EBS es reunir a los dos grupos para fomentar un mejor entendimiento mutuo anual. Al ser preguntado por qué es lo que diferencia a esta cumbre de cualquier otro evento o proceso de consulta organizado por las propias instituciones políticas, el Sr. Malherbe respondió: "la mentalidad empresarial de la cumbre". "Intentaremos evitar debates generalizados sobre la Estrategia de Lisboa, por ejemplo y en su lugar presentaremos representantes de las realidades actuales y trataremos de identificar las respuestas concretas", declaró. Con el ánimo de estrechar la relación entre política y empresa, la EBS establece objetivos y ventajas dobles para ambas partes. Para la empresa, especialmente para la pequeña y la mediana empresa (PYME), la cumbre representa un medio eficaz de comunicar su realidad diaria a los políticos y de obtener perspectivas futuras sobre las áreas que tienen buena salida en el ámbito de la investigación, como la biotecnología, la nanotecnología y las tecnologías ambientales. También es una buena ocasión para conocer las oportunidades que ofrecen las iniciativas públicas, como el Sexto Programa Marco de la Comisión. Las instituciones políticas, por su parte, aplauden la oportunidad de trasladar al sector privado la importancia de la inversión y de la cooperación en las actividades de investigación e innovación. Además, las instituciones políticas de la UE han reconocido las ventajas que ofrece la relación personal con los empresarios, ya que son muchas las personas que tienen poca experiencia directa en el sector privado, en palabras del Sr. Malherbe. En su opinión, uno de los signos más positivos que demuestra que la EBS está valorada de igual manera por empresarios y por políticos ha sido la iniciativa de la DG Investigación de la Comisión y del Dr. Busquin en particular, de financiar la tercera edición del evento. "La idea de que la cumbre de este año se centre en la investigación y la innovación fue de la Comisión, no nuestra", confesaba el Sr. Malherbe. La producción principal de la cumbre será una solicitud clara de las partes implicadas en la investigación y en la innovación al Consejo Europeo de Primavera, centrándose en objetivos y acciones concretas. Cuando se le preguntó qué podría contener esa petición, el Sr. Malherbe subrayó que muchos empresarios consideran que el marco jurídico para la inversión en investigación e innovación dista todavía mucho del ideal. "Por ejemplo, el proceso para obtener una patente en Europa es aún muy complicado y caro; los políticos crean nueva legislación, como las nuevas propuestas REACH, pero no parece que sean conscientes del efecto que ésta puede tener en las empresas más pequeñas; y en áreas nuevas como la biotecnología, Europa continuará por detrás de otros países hasta que se modifique el marco jurídico para los productos", comentó. Preguntado también sobre si la cumbre se convertirá en una referencia permanente para la relación entre el sector público y el sector privado en Europa, el Sr. Malherbe declaró que sus ambiciones son muy diferentes. "Mi sueño sería no tener que organizar eventos futuros porque el entendimiento mutuo entre política y empresa es perfecto, pero por ahora eso es sólo un sueño", concluyó.