El temor a una epidemia de gripe lleva a la Comisión a proponer una red europea de laboratorios
En respuesta a las advertencias emitidas por los expertos en salud pública sobre la posibilidad de una futura epidemia de gripe en la UE, la Comisión Europea ha publicado nuevas directrices para contrarrestar un brote grave de la enfermedad. La estrategia define las diferentes fases de la epidemia de la gripe y establece las acciones clave que deben adoptarse en cada una de ellas. Estas acciones abarcan la gestión y la coordinación, la vigilancia, las estrategias de prevención e intervención, la comunicación y la investigación. Aún más, el documento señala el papel de la Comisión y los Estados miembros en la planificación de los preparativos, y propone ámbitos para mejorar la cooperación, incluida la creación de una red europea de laboratorios de gripe humana. "Europa no había padecido una epidemia de gripe en más de 30 años," declaró el Comisario de Salud y Protección de los Consumidores, David Byrne. "Sin embargo, nuestros expertos en salud pública y la Organización Mundial de la Salud (OMS), nos ha advertido de no confiarnos ante la amenaza mortal que supone la gripe. La planificación y la coordinación son herramientas clave para luchar contra los brotes de esta enfermedad." Durante el pasado siglo, los brotes mundiales de gripe, que causaron la propagación de la enfermedad y la muerte, aparecían a intervalos medios de 25 años. La Comisión cree que la UE es especialmente susceptible a una epidemia de gripe, debido a la libertad de movimiento de las personas, animales y bienes en todos los Estados miembros. Los altos funcionarios de la UE creen que deberían coordinarse los planes nacionales para combatir estos brotes de gripe. Y, argumentan que si, por ejemplo, Alemania cerrara sus colegios mientras que otros países no lo hacen, ello supondría una pérdida de confianza en las autoridades públicas. Las propuestas de la Comisión requerirán de cada Estado miembro la creación de un laboratorio de referencia para la gripe humana, constituyéndose así una red formal que garantizará la detección temprana de cualquier epidemia. Entre los planes figura también la puesta en marcha de un mecanismo de aprobación rápida que garantice la pronta autorización de nuevas vacunas y la distribución de fármacos en caso de epidemia. La Comisión ha declarado por su parte que a través de estos planes se pretende suscitar un debate sobre el nivel de preparación dentro de los Estados miembros. El Comisario Byrne concluyó, diciendo: "Espero que las propuestas motiven un debate que rápidamente se traduzca en acciones, y que ofrezcan a los Estados miembros asesoramiento sobre cómo mejorar sus propios planes de preparación contra la gripe."