Acusan al gobierno británico de doblegarse ante la industria en el debate sobre publicaciones científicas
El Comité Especial de Ciencia y Tecnología del Parlamento británico ha castigado al gobierno por lo que define como una confabulación nada saludable con la industria editora en el debate sobre el acceso libre a los resultados de la investigación científica. En julio, el comité de los miembros del parlamento (MP) publicó un informe en el que recomendaba al gobierno tomar determinadas medidas para mejorar el acceso a los resultados de la investigación científica. La respuesta del gobierno, afirma el comité, respalda en teoría gran parte del informe, pero en la práctica no se compromete a implementar ninguna de esas recomendaciones. Muchos señalan que, con el modelo actual, las bibliotecas y demás instituciones con un presupuesto limitado luchan por pagar unas cuotas de suscripción muy altas, mientras que los márgenes de beneficios de los editores científicos siguen siendo extremadamente altos en comparación con la industria de las editoriales en general. El resentimiento es especialmente notable cuando los resultados en cuestión se han producido gracias a esfuerzos de investigación financiados con fondos públicos. En junio, la Comisión Europea presentó un estudio del mercado de las publicaciones científicas en Europa, con el fin de determinar las condiciones requeridas para el funcionamiento óptimo del sector'. En su informe original, el comité de MP recomendaba al gobierno que respaldara la creación de un sistema nacional de centrales de información institucionales, en las que los centros de enseñanza superior puedan almacenar los resultados publicados y, de este modo, facilitar el acceso a los mismos. También pedía al gobierno que investigara el impacto de introducir un modelo de 'author-pays' (el autor paga) de publicaciones científicas, en el que el propio investigador o la entidad que financia su trabajo paga para publicar los resultados en una revista, que de esta forma ofrece un acceso libre a los mismos. La respuesta del gobierno aglutina diferentes opiniones procedentes de los distintos departamentos, como el Ministerio de Comercio e Industria (DTI), el Comité Común de los Sistemas de Información (JISC) y los Consejos de Investigación del Reino Unido (RCUK). Respecto a los depósitos institucionales de información, aunque el gobierno reconoce 'las posibles ventajas de los depósitos de información institucionales y los considera un avance importante que merece promover, afirma que cada institución debe tomar su propia decisión sobre estas centrales de información en función de sus circunstancias particulares.' Sin embargo, los MP señalan que el gobierno delega la responsabilidad de crear depósitos institucionales en el plano nacional, por lo que restringe las ventajas que dichos depósitos pueden presentar para acceder a las publicaciones científicas.' Con respecto a estudiar el modelo de publicación 'author-pays', el gobierno ha señalado que 'en un mercado en el que compiten diferentes organizaciones para prestar servicios a la comunidad académica, el gobierno considera que no debe intervenir para apoyar un modelo u otro. El gobierno tampoco está convencido de que el modelo 'author-pays' sea inherentemente superior al modelo actual.' No obstante, el comité alega que la respuesta del gobierno demuestra que en vez de afrontar las cuestiones complejas que le presenta el informe del comité, el gobierno ha decidido claramente situarse en contra del modelo author-pays antes de proceder a realizar una investigación más exhaustiva, que es lo que se le sugirió. Esta actitud prejuzga la cuestión.' El Comité Especial concluye que tenemos que plantearnos si la respuesta que hemos recibido del gobierno refleja la diversidad de opiniones e intereses que representan esos departamentos y organismos. De hecho, los MP señalan que el JISC se ha visto presionado para modificar su respuesta inicial - que ha visto el comité - porque difería sustancialmente, tanto en el tono como en el contenido, de la del gobierno. Es lamentable que un organismo experto se tenga que sentir limitado al ejercer su función de asesorar, que le ha sido asignada por el propio gobierno,' afirma el comité. El presidente del Comité Especial, el MP laborista Dr. Ian Gibson, dijo que 'el gobierno simplemente está apoyando a la industria. Existe una confabulación en alguna parte que no es nada saludable. Parece que el DTI está más interesado en doblegarse ante la presión de las editoriales poderosas que en salvaguardar los intereses de la ciencia británica. Esto no es política basada en evidencias, sino evidencias basadas en política.'
Países
Reino Unido