El CESE alaba la continuación del Fondo de Investigación del Carbón y del Acero
El Comité Económico y Social Europeo (CESE) ha apoyado la continuación del Fondo de Investigación del Carbón y del Acero y ofrece su apoyo a la creación de plataformas de tecnología en los sectores del carbón y del acero. En un dictamen de iniciativa aprobada en el pleno de julio, el CESE recomienda mantener en el futuro previsible tanto los mismos órganos consultivos para la gestión del programa como el mismo procedimiento de evaluación. También establece lo que considera deben ser las prioridades de investigación futuras para el carbón y el acero. La colaboración en el ámbito de la investigación de la CECA llegó a su fin con la expiración del Tratado CECA el 23 de julio de 2002. Sin embargo, el capital excedente aportado por las industrias del acero y del carbón durante los 50 años de vigencia del Tratado permite en la actualidad prolongar este tipo de investigación colectiva. El Fondo de Investigación del Carbón y del Acero (Research Fund for Coal and Steel, RFCS) se creó en febrero de 2003. Casi tres años después de entrar en vigor, el CESE considera que "se ha preservado el espíritu de la colaboración en el ámbito de la investigación de la CECA". Para el carbón y el acero el dictamen del CESE apoya la creación de plataformas europeas de tecnología (de hecho se han creado ya plataformas en los dos sectores), y subraya que las prioridades identificadas por las plataformas deberían ser también prioridades de la UE y aplicadas con distintos instrumentos financieros como el RFCS y los programas marco. El CESE desearía crear en el sector del acero una Iniciativa Tecnológica Conjunta y "prevé para la industria siderúrgica una necesidad esencial de colaboración en el ámbito de la investigación a fin de mantener e incluso reforzar la actual posición de liderazgo mundial de esta industria, una posición que es al mismo tiempo sostenible y competitiva". El CESE llama la atención sobre las siguientes cuestiones importantes que deben abordarse a través de la investigación: la protección del medio ambiente y el aumento de la eficiencia energética; el aumento de la seguridad y la protección mediante el desarrollo de nuevas aplicaciones inteligentes y más seguras; y la atracción y mantenimiento de personal cualificado. En lo que respecta al carbón, el CESE acoge favorablemente las nuevas prioridades europeas relativas a la energía y el compromiso a favor de las tecnologías limpias del carbón como una prioridad esencial del VII Programa Marco. Por consiguiente, el programa debería aspirar a mejorar la eficiencia para reducir las emisiones y utilizar de manera sostenible los recursos, así como adoptar medidas de retención y almacenamiento del CO2. Sin embargo sigue habiendo ámbitos que requieren atención como la disminución de la tasa de éxito de las propuestas del proyecto. Aunque el número de propuestas presentadas en relación a los fondos disponibles ha aumentado, la tasa de éxito se sitúa ahora en alrededor del 30 por ciento, comparado con el 55 ó 55 por ciento de principios de la década. Además, aunque el número de investigadores de los diez nuevos Estados miembros que participan en la investigación europea en el ámbito del carbón y del acero ha aumentado, el porcentaje sigue siendo bajo, 4,2 por ciento para el acero y 14,16 por ciento para el carbón. Sin embargo, el CESE concluye que "tras un periodo de transición de tres años, el programa de investigación RFCS ha resultado ser eficaz".