Transformando a los científicos en mejores comunicadores
De todos es sabido que se necesitan décadas para que el impacto de la inversión en ciencia y tecnología en la resolución de problemas sea evidente a nivel político. La mayoría de las veces, la duración del proyecto es demasiado corta para que su impacto sea muy visible. Sin embargo, cuando la investigación afecta a cuestiones urgentes como el cada vez más reducido suministro de agua, hay una necesidad real de acelerar el proceso de impacto. Un informe reciente encargado por el Programa Comunitario de Cooperación Internacional en Ciencia y Tecnología (UE-INCO) sobre sus proyectos de investigación relacionados con el agua destacó que la confianza, la importancia percibida y la capacidad para comunicar son condiciones previas clave para el impacto de un proyecto. El conocimiento de estos factores, explica el informe, puede ayudar a los investigadores para que sean más efectivos en la forma como se dirigen al público no científico y cómo comunican sus resultados fuera de las conferencias y publicaciones científicas. Aumentar la sensibilidad respecto a la importancia de una comunicación efectiva fue el objetivo de un taller que tuvo lugar en Bruselas el 21 de junio. Reunió a unos 60 coordinadores de proyecto de los proyectos de investigación financiados por INCO que abordan la gestión integrada de los recursos hídricos (IWRM), y estudió algunas de las herramientas de comunicación necesarias para garantizar que los investigadores se comprometen de forma constructiva con las actitudes de los usuarios del agua, los gestores del agua, los profesionales y la comunidad política del agua. En una sesión dedicada al "trato con los medios de comunicación", Martin Ince, comunicador y periodista científico independiente, hizo que los participantes realizaran una serie de ejercicios para ayudarles a divulgar mejor sus resultados. En un ejercicio, se pedía a los participantes que describieran su proyecto con una sola frase, tipo SMS, en otro ejercicio los investigadores hacían el papel de periodista y se entrevistaban entre sí. El objetivo de estos ejercicios era ayudar a los investigadores a usar un lenguaje más conciso y simple a la hora de explicar su trabajo a personas ajenas al mundo académico. "Los científicos pueden comunicarse perfectamente con sus colegas de profesión", explicó el Sr. Ince a Noticias CORDIS. Pero hay otro público con el que los investigadores encuentran más dificultades a la hora de comunicarse, especialmente con el que está involucrado en los procesos políticos y en las correspondientes instituciones políticas responsables, como en el sector del agua. Este público destinatario es especialmente importante si la investigación lleva a una gestión del agua sostenible. "Quizás lo más interesante es que se habla mucho de comunicar con el público - si uno se cree en la existencia de un público�, dijo el Sr. Ince. En el caso de los proyectos INCO de investigación sobre el agua, el público está constituido por las personas que beben agua, que tienen granjas, que, en cierta medida, son los usuarios de la investigación, "No son solo el público en un sentido abstracto, son las personas cuyas vidas son afectadas por la investigación�. "Los científicos encuentran difícil comunicar con estos grupos, en parte porque en el pasado no ha sido una prioridad y, en parte, porque algunos de los proyectos se desarrollan en países en los que los medios de comunicación no son en absoluto tan libres para decir las cosas como lo son en Europa", explicó el Sr. Ince. "También es porque la comunicación no es un campo al que hayan tenido que prestar mucha atención. Realmente no han visto demasiadas ventajas en él". Sin embargo, los días en que los científicos trabajaban aislados en su laboratorio se han acabado. "En muchos países de Europa, cada vez es más prioritario para los científicos el comunicar sus investigaciones. Pienso que todavía no se ha llegado a este nivel en los países en vías de desarrollo". Dado que en los proyectos INCO de investigación sobre el agua participan socios de la UE y de otros países, el Sr. Ince piensa que talleres como estos son útiles y ayudan a extender las buenas prácticas. De hecho, se puede aprender mucho de la experiencia de Felicita Scapini de la Universidad de Florencia (Italia) una de las participantes en el taller. Es la coordinadora del proyecto "Water in Demand" (WADI), un proyecto financiado por INCO destinado a fomentar los planteamientos participativos para el uso sostenible de los recursos de agua dulce en zonas costeras mediterráneas con escasez de agua dulce. El proyecto implica actividades de investigación y divulgación en seis lugares de estudio situados en zonas costeras del Mediterráneo, tanto en el Norte como en el Sur. Es el tercer proyecto consecutivo realizado por los socios. A diferencia de los dos primeros proyectos, los socios de WADI decidieron ponerse en contacto desde el inicio con los interesados clave en los lugares seleccionados, invitándoles a colaborar en el proyecto proporcionando la información necesaria sobre el suministro del agua, sus usos y su demanda. "Decidimos que la comunicación fuera una parte más explícita del proyecto WADI", explicó la Sra. Scapini. Se dio cuenta de que cuando las autoridades locales no eran involucradas desde el comienzo, no estaban interesadas en los resultados finales del proyecto. "De todas formas, cuando vamos a un sitio para realizar un estudio necesitamos ponernos en contacto con las autoridades locales y con los ministerios para obtener los permisos, y tenemos que explicarles porqué estamos allí. Pensamos que era una mejor estrategia comprometerlos desde el principio y conseguir así algo que les pueda ser útil" WADI también se compromete con la población local, especialmente con quienes no siempre están bien representados, básicamente mujeres y niños. Nefza, uno de los lugares de estudio del proyecto, es una pequeña población en el noroeste de Túnez, a 15 kilómetros de una zona costera sometida a erosión. Allí, los socios del proyecto realizaron actividades y juegos didácticos con los alumnos de la escuela primaria local. "Llevamos a los niños a la playa para enseñarles que es un ecosistema vivo con animales y plantas, y que el entorno en el que viven es muy rico", explicó la Sra. Scapini. El impacto fue muy positivo, comentó. "Los profesores nos confirmaron que los niños comprendieron el mensaje. Volvieron a sus casas y explicaron las actividades a sus familias". Los socios de WADI pretenden repetir la actividad en el lugar de estudio en Marruecos. De vuelta a Italia, cerca de otro de los lugares de estudio del proyecto, los socios decidieron organizar una exposición sobre el medio ambiente del Mediterráneo en un museo de Florencia. "El Mediterráneo es una historia única: todos los países en la región tienen los mismos problemas medioambientales como la falta de agua y la erosión de las playas", dijo la Sra. Scapini. Orientado tanto a los turistas como a los ciudadanos de Florencia, los socios combinaron una serie de diapositivas y un conjunto de paneles en inglés y en italiano describiendo algunos de los problemas a los que se enfrenta la región. "Nuestro objetivo era hacer que tanto los turistas como los ciudadanos fueran conscientes de la herencia cultural y natural y de la importancia de la ciencia como vínculo. Porque cuando hay problemas sociopolíticos en el Mediterráneo, la ciencia siempre ha ayudado", explicó. La exposición atrajo a unos 300 visitantes, a lo largo de una semana. Animados por el interés mostrado por el público, los socios del proyecto pretenden trasladar la exposición a Malta. Otra participante en el taller fue Sylvana Gayoso de la Universidad Austral de Chile. Se trata de una de las socias de EPIC FORCE, un proyecto INCO centrado en mejorar el impacto que tiene la gestión forestal sobre el comportamiento de las cuencas fluviales en lo que respecta al caudal hidrológico y la erosión del suelo ante precipitaciones abundantes. Ésta es un área en la que existe una gran incertidumbre científica y una política poco desarrollada. "Uno de los grupos a los que apuntábamos es el sector público y pensamos que hemos logrado nuestro objetivo porque algunas de las recomendaciones que hicimos a propósito de la gestión de una zona de seguridad han sido retomadas por responsables políticos", declaró la Sra. Gayoso. Estas recomendaciones han sido integradas en la legislación que está siendo revisada actualmente por el Parlamento chileno y que se adoptará en los próximos meses. Preguntada sobre cómo han conseguido los socios convencer a los responsables políticos, la Sra. Gayoso explicó a Noticias CORDIS que el tener una fuerte presencia en las publicaciones científicas y el aparecer en Internet ha sido muy útil. "Somos una institución científica reconocida en Chile así que cuando el Ministerio de Agricultura comenzó a estudiar las zonas de seguridad para los ríos, el primer trabajo que leyeron era nuestro. Y decidieron que nuestro trabajo en materia de gestión de zonas de seguridad en ríos era la mejor solución para la situación chilena". Pero para llegar a los demás usuarios del estudio, como granjeros y administradores forestales, la Sra. Gayoso cree que se necesita una mayor dimensión de comunicación "no científica": "Éste es un problema para nosotros porque en las universidades no hay fondos para publicar trabajos en revistas no científicas y comunicar los resultados por vías alternativas, así que los científicos siempre optan por publicaciones científicas para mejorar sus carreras profesionales". Aquí es donde los fondos de INCO aparecen. "Programas como éstos, que destinan fondos para la comunicación de un proyecto, nos ofrecen la oportunidad de enseñar a una audiencia más grande lo que estamos haciendo", explicó la Sra. Gayoso. En una revisión reciente del proyecto financiado por INCO sobre la gestión integrada de los recursos hídricos (IWRM), un panel de expertos recomendó que el VII Programa Marco (VIIPM) debería tener más en cuenta la necesidad de más fondos para una mejor comunicación entre científicos y grupos socioeconómicos. Sin embargo, esto no debería representar un gasto adicional para la ciencia dedicada a estos temas ecológicos y medioambientales.