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QUalifying and Implementing a user-centric designed and EfficienT electric vehicle

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La mejora de las prestaciones de los vehículos eléctricos contribuye a frenar el calentamiento global

Las ventas de vehículos eléctricos van en aumento, en consonancia con los objetivos climáticos de la Unión Europea para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Los investigadores han aportado tecnologías revolucionarias para que los vehículos eléctricos sean más cómodos y más eficientes en materia de energía, lo que facilita esta tendencia.

Transporte y movilidad icon Transporte y movilidad

En el Acuerdo de París de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2015 se estableció el objetivo de limitar el calentamiento global muy por debajo de los 2 °C en comparación con los niveles preindustriales. Para alcanzar este objetivo a largo plazo, los países se propusieron lograr la neutralidad climática a mediados de siglo. Hacer que el transporte sea más sostenible gracias a los vehículos eléctricos (VE) podría desempeñar un papel importante en este sentido. Los estudios sugieren que la cuota de mercado de los VE podría aumentar por encima del 30 % de aquí a 2030.

Mayor eficiencia de los VE

El equipo del proyecto QUIET, financiado con fondos europeos, intervino para desarrollar un VE mejorado y eficiente en materia de energía con mayor autonomía en condiciones de conducción reales. En el proyecto se abordaron los retos existentes que afectan al rendimiento de los VE, desde las condiciones meteorológicas hasta el diseño y los componentes de los vehículos. Las tecnologías desarrolladas se integraron y calificaron en un validador Honda del segmento B de los VE. «El objetivo general era reducir la energía necesaria para refrigerar y calentar el habitáculo de un VE en diferentes condiciones de conducción en al menos un 30 % en comparación con la referencia de Honda de 2017», explican Hansjörg Kapeller y Dragan Šimić, coordinadores del proyecto QUIET. Además, también se abordó la reducción del peso de los componentes del vehículo en un 20 % aproximadamente. El equipo del proyecto determinó cómo se podía mejorar más la eficiencia: optimizar la calefacción/refrigeración de la cabina, reducir las pérdidas de calor de la cabina, utilizar componentes ligeros y optimizar la estrategia de control.

Materiales ligeros avanzados que aligeran el peso

El equipo logró una reducción total del peso de 26,5 kg (lo que corresponde a un ahorro de peso del 24 % en comparación con los materiales habituales) gracias a la utilización de materiales ligeros avanzados. Esto se consiguió diseñando y fabricando cierres de material compuesto para las puertas, el capó y el portón trasero. Asimismo, las ventanas laterales y traseras se cambiaron de vidrio a policarbonato, lo que supuso un ahorro de peso del 35 %. Los bastidores de los asientos se convirtieron en piezas de fundición de aluminio de pared delgada, y los cojines de los asientos se optimizaron para que fueran cómodos y ligeros, lo que supuso un ahorro de peso del 17 %.

Mejora de la eficiencia energética y el confort

Las condiciones climáticas extremas también comprometen la eficiencia de los VE. Con tiempo frío, la autonomía de la batería del VE se reduce en un 56 % y, con calor, en un 12 %. El proyecto se centró en las tecnologías integradas para mejorar la eficiencia energética y el confort y se llevaron a cabo extensas pruebas en todo el vehículo, incluido el rediseño de su sistema de gestión térmica. Además, se ha desarrollado un novedoso control de interfaz hombre-máquina especializado en VE, que permite al usuario interactuar con la gestión térmica y energética diseñada para el usuario. «Todos los sistemas se combinaron y ensamblaron en el vehículo de demostración completamente funcional y se sometieron a rigurosas pruebas para evaluar su rendimiento», añade Kapeller. Tanto en condiciones de invierno como de verano, la autonomía mejoró y se alcanzó el objetivo del proyecto: un aumento del 26 % de la autonomía con tiempo frío y del 2 % con calor. «QUIET aportó una serie de tecnologías de vanguardia que permiten disminuir el consumo de energía para la calefacción y la refrigeración, al tiempo que se reduce el peso de toda la plataforma de validación del VE, lo que se traduce en un aumento de la autonomía de conducción eléctrica en un 26 %», concluye Šimić. El proyecto fue un éxito y ahora se está compartiendo con los fabricantes de equipos originales y los proveedores para garantizar la aplicación de la tecnología.

Palabras clave

QUIET, VE, autonomía, vehículo eléctrico, eficiencia energética

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