El reciclaje de metales sin cuchillas ofrece unos resultados impresionantes
A pesar de su creciente demanda, la tecnología de reciclaje de metales no ha experimentado grandes cambios. El material se tritura con grandes trituradoras o cizallas, se separa manualmente o mediante imanes, y, a continuación, se lleva a fundiciones y fábricas de acero para su reutilización. Las plantas de reciclaje suelen tener que parar cada ocho horas para afilar las cuchillas, que deben sustituirse cada setenta u ochenta horas de media. Las nuevas normas que exigen el reciclaje del 95 % de los coches desguazados han ejercido aún más presión sobre el sector. El mayor desgaste de las cuchillas ha aumentado los costes. «Todo sigue basándose en esta tecnología de trituración tradicional existente», explica la coordinadora del proyecto MRP (página web en italiano), Francesca Guidetti, responsable de Desarrollo Comercial en la empresa italiana Guidetti Recycling Systems. «No se puede reciclar todo el material, y los costes están subiendo, lo que supone un problema, porque hace menos provechoso el reciclaje de metales».
Reciclaje duradero y eficiente
Para solucionar este problema, en el proyecto MRP se intentó probar una nueva tecnología de reciclaje, a base de martillos en lugar de cuchillas. Una de las principales ventajas de esta tecnología, comenta Guidetti, es que permite a los recicladores recuperar casi el 100 % del metal de los residuos, a la vez que se utiliza menos energía y se incurre en unos costes de mantenimiento menores. El equipo del proyecto desarrolló dos prototipos, que utilizan centrifugadoras equipadas con martillos de alta resistencia, alojados en torres, para romper los metales utilizando la fuerza de los golpes en lugar de basarse en el corte. En la sede de la empresa se instaló una planta piloto, mientras que otra se erigió en una planta de reciclaje. «El prototipo que se encuentra en nuestra sede es una torre de cuatro plantas —añade Guidetti—. Los tambores centrífugos utilizan la gravedad para mover el material, lo que reduce significativamente el desgaste y requiere menos energía». Tras esta fase, en la que principalmente el material se hace añicos, se separan las partículas metálicas. Un sistema automático extrae determinados componentes metálicos, como el aluminio y el cobre, a lo largo del proceso. Guidetti indica: «Todo el material que queda pasa a una trituradora turbo final, la cual separa los metales del resto de residuos: plástico, vidrio, madera, papel, etc.». La planta de la sede central estuvo abierta a visitas de clientes potenciales, que pudieron comprobar por sí mismos cómo funciona la tecnología. El prototipo construido en una planta de reciclaje se utilizó de forma continua para probar su validez en condiciones industriales reales.
Alcanzar una economía circular
Estas plantas piloto pudieron demostrar su eficacia a la hora de separar y reciclar aluminio, cobre y otros componentes de una serie de productos, como residuos electrónicos, coches, motores eléctricos y frigoríficos. Esto ayudó a subrayar la eficacia de la nueva tecnología, así como su capacidad para ofrecer un reciclaje de alto rendimiento asequible, junto con un menor consumo de energía. «En el sistema totalmente automatizado solo intervienen dos operarios —señala Guidetti—. Además, ofrece una tasa de reciclaje del 99 %, reduce el desgaste de la maquinaria y requiere mucho menos mantenimiento». Por lo tanto, las empresas de reciclaje se beneficiarán de la eficiencia en las líneas de producción y de la reducción de los costes energéticos. La innovación es un impulso positivo para los recicladores de metales, que desempeñarán un papel fundamental en la transición de Europa hacia la economía circular. Guidetti añade: «La respuesta del sector ha sido magnífica. Ya hemos vendido un sistema y esperamos tener más ventas antes de que acabe el año». Los próximos pasos incluyen la organización de nuevas visitas de clientes potenciales para mostrarles cómo funciona la tecnología en la práctica y cuáles son sus ventajas principales.
Palabras clave
MRP, reciclaje, metal, trituración, residuos, industrial, imanes, cobre, aluminio