El lenguaje: una herramienta que no solo ayuda a comunicarnos, sino también a pensar
¿Es el lenguaje tan solo una herramienta para comunicar pensamientos e ideas? ¿O enmascara algo mucho más complejo desde el punto de vista cognitivo? El equipo del proyecto LANGBOOT, financiado con fondos europeos, se propuso responder a estas dos preguntas. «Nuestro objetivo era investigar si el lenguaje permite a las personas crear y manipular representaciones mentales más complejas de lo que sería posible de otro modo y, por tanto, respaldar procesos cognitivos complejos», afirma Louise Connell, catedrática en la Universidad de Maynooth e investigadora principal del proyecto LANGBOOT.
El lenguaje ayuda a construir ideas y conceptos
En el proyecto, que contó con el apoyo del Consejo Europeo de Investigación, se combinaron conocimientos de diferentes disciplinas como, por ejemplo, la psicología experimental, la psicolingüística, la modelización cognitiva y la lingüística de corpus. Su equipo empleó un planteamiento de ciencia abierta y descubrió la forma en que las personas utilizan el lenguaje para favorecer tanto el pensamiento concreto como el abstracto, incluso cuando no hay necesidad de hacerlo. En concreto, se demostró que el lenguaje ayuda a dividir los conceptos en categorías con mayor rapidez y precisión, lo que permite a las personas recordar más objetos y acontecimientos, así como establecer nuevos vínculos entre conceptos en tareas creativas. «Nuestros resultados son importantes porque indican que las ideas y los conceptos se construyen combinando la información del lenguaje y las experiencias de percepción y acción del mundo circundante —explica Connell—. Esto permite a las personas utilizar el lenguaje de forma muy flexible para crear representaciones mentales que se adapten a sus necesidades en cada momento».
Apoyo a la complejidad cognitiva
En el proyecto se logró desarrollar una nueva comprensión teórica de cómo el lenguaje y las experiencias de percepción y acción trabajan en conjunto para respaldar el proceso cognitivo. «Al asociar palabras a ideas, el lenguaje permite representar y procesar la información de forma más eficaz, lo que apoya la complejidad cognitiva potencial de la mente», observa Connell. Fiel a su compromiso con la ciencia abierta, el equipo del proyecto ha publicado sus investigaciones y resultados a través de artículos, conjuntos de datos y herramientas informáticas de acceso libre. «Algunos de estos conjuntos de datos y herramientas ya han cambiado la forma en que la comunidad investigadora puede ahondar en este tema», agrega Connell. En cuanto a las investigaciones ulteriores, Connell comenta que ya trabaja en varios proyectos de seguimiento, en los que se pretende aplicar algunos de los hallazgos del proyecto LANGBOOT sobre el lenguaje y la cognición a nuevas líneas de investigación.
Palabras clave
LANGBOOT, lenguaje, pensamiento abstracto, cognición, psicología, ciencia abierta
